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[Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
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[Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Chikao Miér Abr 30, 2014 12:34 pm
Del lado Este de la plaza, cruzando la via, se encuentra esta tienda. Dentro de ella, podrás encontrar casi cualquier objeto que busques, sea artesanal o de origen industrial...
"Si no lo tengo, no existe y si no existe, lo creare para ti... Por el precio adecuado"
Así reza, un aviso que puede leerse del costado izquierdo, dentro del local, a poco de entrar en el, del otro lado de la tienda, vas a encontrarte, al menos 4 muy cómodos sillones donde puedes descansar mientras se te entrega tu pedido o bien esperar llegue tu turno, al final del local, se encuentra la caja, desde donde vas a encontar indefectiblemente la figura del sombrero y las sandalias que le dá nombre al lugar, Chikao, propietario del local.
Entre Chikao y la puerta de entrada, del lado izquierdo, pasando el aviso, se encuentra la puerta del deposito, desde donde el cliente entregará un recibo y se dirigirá hasta la caja.
En la caja, se unen finalmente, Cliente y Mercancía.
En el sector de espera, también se encuentran máquinas de dispensadoras, una de bebidas frías, otra de bebidas calientes, por si no te agradan los refrescos o sodas de determinado sabor, puedes escoger entre azucar refinada, o bien, puedes endulzarlo con otro medio disponible también, puedes acompañarlo de pan caliente tostado o pequeñas varillas de pan.
Cuando entres asegúrate de tomar tu número y enseguida serás atendido!
Bienvenid@ a la tienda Estimado Amigo!
"Si no lo tengo, no existe y si no existe, lo creare para ti... Por el precio adecuado"
Así reza, un aviso que puede leerse del costado izquierdo, dentro del local, a poco de entrar en el, del otro lado de la tienda, vas a encontrarte, al menos 4 muy cómodos sillones donde puedes descansar mientras se te entrega tu pedido o bien esperar llegue tu turno, al final del local, se encuentra la caja, desde donde vas a encontar indefectiblemente la figura del sombrero y las sandalias que le dá nombre al lugar, Chikao, propietario del local.
Entre Chikao y la puerta de entrada, del lado izquierdo, pasando el aviso, se encuentra la puerta del deposito, desde donde el cliente entregará un recibo y se dirigirá hasta la caja.
En la caja, se unen finalmente, Cliente y Mercancía.
En el sector de espera, también se encuentran máquinas de dispensadoras, una de bebidas frías, otra de bebidas calientes, por si no te agradan los refrescos o sodas de determinado sabor, puedes escoger entre azucar refinada, o bien, puedes endulzarlo con otro medio disponible también, puedes acompañarlo de pan caliente tostado o pequeñas varillas de pan.
Cuando entres asegúrate de tomar tu número y enseguida serás atendido!
Bienvenid@ a la tienda Estimado Amigo!
Chikao- Mensajes : 36
Localización : Frente a la plaza de los inventos, en mi humilde local
Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Pharys Azure Jue Mayo 01, 2014 3:10 pm
Pharys hubiese podido salir más temprano si no la hubiese detenido una eventualidad de fuerza mayor, que en resumidas cuentas es su reina. La chica usaba su atuendo habitual que deja en destacamento una mezcla entre lo infantil y lo intrépido, con detalles femeninos y aventureros a la vez, utilizando un adorno sencillo para su cabello y hombros descubiertos bajo la capa blanca que la designa como parte de la caballería, acompañando y disimulando un poco el escote de su prenda superior, tanto como su falda corta pero decente que puede restarle la magnificencia de una armadura a cambio de la gracilidad de sus movimientos. Un conjunto que aprecia y encuentra bonito en primer lugar, pero a su majestad no le resultó del todo agradable para ese día, justificando su decisión en que la joven guardia no iba a escoltar a nada ni a nadie en su paseo, sino por el contrario ser una persona "común" entre lo que le permite su cargo y su postura en Calad'Meeth. No es una muchacha cualquiera, menos que menos luego de todo el trabajo que hubo que hacerse para transformarla en lo que es hoy, entonces sería descortés y poco propio de la caballería no aceptar la sugerencia y obsequio que en el propio palacio le estaban dando con tanta gratitud; la reina le dio la orden de usar un vestido, como el que vestiría una jovencita de su aspecto y apariencia. Pharys no sabía si estar contenta o estar halagada, concluyendo en que era mejor estar feliz por el regalo.
No quita el hecho de que los vestidos nunca son lo suyo, le incomoda un poco al caminar una falda tan larga y se ve obligada a caminar algo más lento de su ritmo habitual, por no mencionar que sus pasos deben hacerse más cortos al tener que caminar con una postura un tanto distinta al deber sostener una sombrilla apoyada en su hombro, y lucir un lindo maquillaje cortesía de la figura de autoridad que más ama y respeta. No se siente como parte de la caballería, pero vaya que se siente como una dama.
Debe ser que no tenga la costumbre de caminar con otra cosa que no sean sus botas, pero andas con esos zapatos finos ciertamente la hace sentir un poco incomoda, aunque sean de alta calidad y bastante confortables por no apretarla o lastimar sus pies, no tiene el hábito de tener algo de tanta clase puesto. Habría en serio preferido vestir placas de armadura bajo su falda de no ser por el ruido que las mismas hacen con cada paso, cosa que le conseguía seguro un castigo por no procurar ser linda y delicada al menos una vez. Pharys desea complacer como sea posible en agradecimiento de todo lo que han hecho por ella, y si ellos creen que es necesario tener este aspecto para pasear por la calurosa Miryathir entonces debería hacer el intento, seguro que se debe al hecho de que las armaduras sean todavía más calurosas o su atuendo habitual capte demasiado la atención de pervertidos... Y si son captados ahora por el escote decente de su vestido, es porque son más degenerados de lo que se puede pensar.
Fuera de todo intento de verse como una señorita común, tiene que mantener un mentón en alto y su pecho ligeramente pronunciado hacia adelante, señal del orgullo propio de la caballería, porque eso es lo que le dirían que hiciera sus superiores y compañeros veteranos, como recordatorio de que la caballería es más que técnica y votos, sino también responsabilidad, y una de esas sería tener el porte adecuado sin importar que en lugar de una espada haya una sombrilla en sus manos. El color azul destaca en ella, disonante un poco con el gris, castaño y negro de la mayoría de personas que consigue por las calles abarrotadas de compradores y vendedores, y los grupos de locos que se la pasan midiendo la longitud de los cañones de sus armas y cuantos disparos pueden hacer con más velocidad. Ver ese tipo de cosas la hace reír un poco entre dientes, diciendo para sus adentros lo que aprendió de escuchar a las chicas en los puertos de Miryathir antes de pertenecer a la guardia personal. "Tontos, ¿Que no saben que a las chicas les gusta más la cantidad de munición en lugar de lo rápido que vacían el cargador?"
Entre todo el polvo y la humareda que se levanta junto con el calor que emanan las herrerías y locales de venta de repuestos y partes metálicas, puede detallar algo frente a la plaza que es bastante lejano al ambiente que los steampunks le han dado a todo el distrito comercial. Un local artesanal que tiene un nombre sugerente a pensar eso, haciendo competencia a las tiendas de botas con refuerzos de aluminio o cascos para pilotear aparatos voladores o herramientas de todo tipo. Un lugar lindo, un pedazo de calma es como lo puede llamar la chica al momento en que entra. - Buenas tardes~ - Pronuncia al examinar curiosa de pared a pared el sitio, notando alguna que otra máquina que ya sería necesaria para lo que se requiere en esta ciudad. Bajando la sombrilla y retrayendo el mecanismo para cerrarla, ocupa asiento en uno de los sillones pensando en que cosas le mostrarían, aunque honestamente duda que vaya a salir con algo de esa tienda sabiendo que no tiene almas suficientes para hacer compra alguna en esos momentos.
Puede que lo único que quiera es una tarde en la gigantesca Excelsus.
No quita el hecho de que los vestidos nunca son lo suyo, le incomoda un poco al caminar una falda tan larga y se ve obligada a caminar algo más lento de su ritmo habitual, por no mencionar que sus pasos deben hacerse más cortos al tener que caminar con una postura un tanto distinta al deber sostener una sombrilla apoyada en su hombro, y lucir un lindo maquillaje cortesía de la figura de autoridad que más ama y respeta. No se siente como parte de la caballería, pero vaya que se siente como una dama.
Debe ser que no tenga la costumbre de caminar con otra cosa que no sean sus botas, pero andas con esos zapatos finos ciertamente la hace sentir un poco incomoda, aunque sean de alta calidad y bastante confortables por no apretarla o lastimar sus pies, no tiene el hábito de tener algo de tanta clase puesto. Habría en serio preferido vestir placas de armadura bajo su falda de no ser por el ruido que las mismas hacen con cada paso, cosa que le conseguía seguro un castigo por no procurar ser linda y delicada al menos una vez. Pharys desea complacer como sea posible en agradecimiento de todo lo que han hecho por ella, y si ellos creen que es necesario tener este aspecto para pasear por la calurosa Miryathir entonces debería hacer el intento, seguro que se debe al hecho de que las armaduras sean todavía más calurosas o su atuendo habitual capte demasiado la atención de pervertidos... Y si son captados ahora por el escote decente de su vestido, es porque son más degenerados de lo que se puede pensar.
Fuera de todo intento de verse como una señorita común, tiene que mantener un mentón en alto y su pecho ligeramente pronunciado hacia adelante, señal del orgullo propio de la caballería, porque eso es lo que le dirían que hiciera sus superiores y compañeros veteranos, como recordatorio de que la caballería es más que técnica y votos, sino también responsabilidad, y una de esas sería tener el porte adecuado sin importar que en lugar de una espada haya una sombrilla en sus manos. El color azul destaca en ella, disonante un poco con el gris, castaño y negro de la mayoría de personas que consigue por las calles abarrotadas de compradores y vendedores, y los grupos de locos que se la pasan midiendo la longitud de los cañones de sus armas y cuantos disparos pueden hacer con más velocidad. Ver ese tipo de cosas la hace reír un poco entre dientes, diciendo para sus adentros lo que aprendió de escuchar a las chicas en los puertos de Miryathir antes de pertenecer a la guardia personal. "Tontos, ¿Que no saben que a las chicas les gusta más la cantidad de munición en lugar de lo rápido que vacían el cargador?"
Entre todo el polvo y la humareda que se levanta junto con el calor que emanan las herrerías y locales de venta de repuestos y partes metálicas, puede detallar algo frente a la plaza que es bastante lejano al ambiente que los steampunks le han dado a todo el distrito comercial. Un local artesanal que tiene un nombre sugerente a pensar eso, haciendo competencia a las tiendas de botas con refuerzos de aluminio o cascos para pilotear aparatos voladores o herramientas de todo tipo. Un lugar lindo, un pedazo de calma es como lo puede llamar la chica al momento en que entra. - Buenas tardes~ - Pronuncia al examinar curiosa de pared a pared el sitio, notando alguna que otra máquina que ya sería necesaria para lo que se requiere en esta ciudad. Bajando la sombrilla y retrayendo el mecanismo para cerrarla, ocupa asiento en uno de los sillones pensando en que cosas le mostrarían, aunque honestamente duda que vaya a salir con algo de esa tienda sabiendo que no tiene almas suficientes para hacer compra alguna en esos momentos.
Puede que lo único que quiera es una tarde en la gigantesca Excelsus.
Pharys Azure- Mensajes : 24
Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Chikao Jue Mayo 01, 2014 9:10 pm
Era la tarde de un día, el día afuera parecía caluroso... Chikao intentaba mantener la tienda lo más fresca posible, sacando todo el calor posible usando una extraña combinación de corrientes de aire. El día había estado tranquilo, Chikao, cercano a la caja registradora, ahora estaba de espaldas a la puerta subido en una pequeña banqueta, intentando acomodar algunas cajas con mercancía que había intercambiado con los locales, había algunas todavía en el piso y las otras estaban en un estante cercano que iba desde el piso hasta el techo.
Siendo honesto consigo mismo, intentaba que la tienda estuviera lo más ordenado posible, era "el nuevo" y seguramente quién viniera... Era todo un desafío, tenía que superar a todos los locales para poder vender sus mercancías, quizás a regañadientes admitiera que esa dificultad hasta cierto punto le agradaba, sabía como debía de hacerlo, despues de todo había sido su oficio anterior.
El silencio que había en la tienda, hizo que el sonido del picaporte al bajar y abrirse la puerta, le distrajera por algunos instantes, seguido a ello, traspuso el umbral una sombrilla que dio paso a una joven, un vistazo por el rabillo del ojo, notó que una cliente femenino, había entrado a su tienda, girando su cabeza para obsrvar mejor, notó que había algo que le llamaba la atención... ¿El maquillaje de la joven, el vestido, la sombrilla? En conjunto, toda la joven parecía una pieza de exposición...
"-Buenas tardes~-"
Pronunció la joven, hacia el interior, eso bastó para que Chikao dejara el inventario para más luego, había algo más importante primero... Una clienta, y a juzgar por la apariencia, tenía un aspecto de ser una joven con... A falta de una palabra más precisa "Muchos Recursos"
"Chikao!... Tienes visitas despues de mucho tiempo!!! Tu primer cliente... Y tiene aspecto de que vaya a comprar bastante... A juzgar por su apariencia seguro se llama Zsafira..."
"¿De donde sacas esos nombres??? ¿Zsafira?... ¿En serio? ¿Ese nombre es lo mejor que se te ocurrió...? Primero deja ver que quiere comprar ¿Vale???"
"Eres aburrido, pero por el momento te concedo la tregua, tienes razón en que primero examinemos mejor... ¿Podría ser alguna monarca encubierta buscando Tecnología Ancestral Alienígena?"
"BASTA!... Deja de divagar... y esta atento, mantén los sentidos escudriñando todo el tiempo"
Desde la posición en que estaba, y dirigiéndose hacia la joven le respondió el saludo... mientras se acomodaba, primero el sombrero, luego la bata, para un instante despues tomar por precaución su bastón y ahora si, en dirección de la joven, caminando despacio apoyando de un lado su bastón.
-Ma plus haute dame! Vous avez un très bon après-midi ou peut-être saphir lapis?... Que peut aider cette humble serviteur?-
Al llegar donde la joven se había sentado, con su mano izquierda le saludó apuntando su mano, con los dedos juntos como si fuera una esapda, primero a su corazón tocando con su dedo mayor el medio del pecho, luego su boca y paso posterior su frente, cubierta por el sombrero, luego su mano hizo un giro hacia afuerza descendente; finalmente hizo una breve reverencia, quitándose el sombrero por un instante, con la misma mano izquierda para luego volver a su posicion, de frente a la joven, apoyando ahora, ambas manos en su bastón, mientras observaba a la joven a los ojos.
-Preferís este lenguaje Maidmoiselle? Buenas tardes y bienvenida a "Sandalias y Sombreros"; Decidme Maidmoiselle... ¿En que puedo serviros el día de hoy-
Siendo honesto consigo mismo, intentaba que la tienda estuviera lo más ordenado posible, era "el nuevo" y seguramente quién viniera... Era todo un desafío, tenía que superar a todos los locales para poder vender sus mercancías, quizás a regañadientes admitiera que esa dificultad hasta cierto punto le agradaba, sabía como debía de hacerlo, despues de todo había sido su oficio anterior.
El silencio que había en la tienda, hizo que el sonido del picaporte al bajar y abrirse la puerta, le distrajera por algunos instantes, seguido a ello, traspuso el umbral una sombrilla que dio paso a una joven, un vistazo por el rabillo del ojo, notó que una cliente femenino, había entrado a su tienda, girando su cabeza para obsrvar mejor, notó que había algo que le llamaba la atención... ¿El maquillaje de la joven, el vestido, la sombrilla? En conjunto, toda la joven parecía una pieza de exposición...
"-Buenas tardes~-"
Pronunció la joven, hacia el interior, eso bastó para que Chikao dejara el inventario para más luego, había algo más importante primero... Una clienta, y a juzgar por la apariencia, tenía un aspecto de ser una joven con... A falta de una palabra más precisa "Muchos Recursos"
"Chikao!... Tienes visitas despues de mucho tiempo!!! Tu primer cliente... Y tiene aspecto de que vaya a comprar bastante... A juzgar por su apariencia seguro se llama Zsafira..."
"¿De donde sacas esos nombres??? ¿Zsafira?... ¿En serio? ¿Ese nombre es lo mejor que se te ocurrió...? Primero deja ver que quiere comprar ¿Vale???"
"Eres aburrido, pero por el momento te concedo la tregua, tienes razón en que primero examinemos mejor... ¿Podría ser alguna monarca encubierta buscando Tecnología Ancestral Alienígena?"
"BASTA!... Deja de divagar... y esta atento, mantén los sentidos escudriñando todo el tiempo"
Desde la posición en que estaba, y dirigiéndose hacia la joven le respondió el saludo... mientras se acomodaba, primero el sombrero, luego la bata, para un instante despues tomar por precaución su bastón y ahora si, en dirección de la joven, caminando despacio apoyando de un lado su bastón.
-Ma plus haute dame! Vous avez un très bon après-midi ou peut-être saphir lapis?... Que peut aider cette humble serviteur?-
Al llegar donde la joven se había sentado, con su mano izquierda le saludó apuntando su mano, con los dedos juntos como si fuera una esapda, primero a su corazón tocando con su dedo mayor el medio del pecho, luego su boca y paso posterior su frente, cubierta por el sombrero, luego su mano hizo un giro hacia afuerza descendente; finalmente hizo una breve reverencia, quitándose el sombrero por un instante, con la misma mano izquierda para luego volver a su posicion, de frente a la joven, apoyando ahora, ambas manos en su bastón, mientras observaba a la joven a los ojos.
-Preferís este lenguaje Maidmoiselle? Buenas tardes y bienvenida a "Sandalias y Sombreros"; Decidme Maidmoiselle... ¿En que puedo serviros el día de hoy-
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Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Pharys Azure Vie Mayo 02, 2014 10:45 pm
El espacio está algo desordenado pero ordenado en su desorden, si es que algo como eso tiene sentido, de forma que todo parece estar acomodado a los gustos y hasta apariencia del vendedor. Pharys sonríe ante la primera impresión del vendedor aunque ya antes estaba sonriendo, quien era alguien simple y hasta pintoresco, con un toque de carisma que esta ciudad no tiene. ¿Será un sobreviviente del otro continente? Es lo primero que pasa por su cabeza, no por discriminarlo sino todo lo contrario, apreciar que no haya quedado resentimiento y que acepte su derrota con firmeza al tratar de levantarse. La chica sostiene la sombrilla ya cerrada entre sus manos, mientras escucha todas las palabras que ha pronunciado el hombre con tal soltura que puede hasta intimidar. No ha entendido ni una sola palabra de esa lengua, cosa que refuerza la idea de que viene de otras tierras y juzgando por la decencia y gracia con la que se ha acercado para dedicárselas, deben ser cumplidos o algo de esa naturaleza. No quiere parecer grosera, pero su sonrisa nerviosa y su expresión de confusión hablarán por ella mejor, resumiendo en que lo que quiere decir no es otra cosa sino "No entendí ni jota". Es aquí cuando se culpa a si misma por no estudiar suficiente sobre idiomas y centrarse demasiado en ciertas ramas literarias o musicales donde asegura que se defiende mejor.
Por todas las maniobras gestuales que hace demuestra ser alguien de cultura, cosa que pone un poco más nerviosa a Pharys que intenta descifrar la palabra que ha usado el hombre. "Vaya, me ha llamado... Ma... Ma... Algo así empezaba. No tengo idea que será pero no suena a que es algo malo, en cambio parece un cumplido de esos que no creo deba recibir. Seguro es el vestido...".
- Eh... Si, entiendo mejor ese lenguaje... - Ríe con el tono característico de un gesto forzado, sin añadir otra parte de la verdad que se guarda por vergüenza y no decir directamente que nada más habla un idioma. La presentación del dueño es tan elaborada que la hace pensar si será así con todo el que entra en su tienda, y de ser afirmativo entonces todo el mundo debería comprarle aunque sea algo. No tiene que ser lo más costoso, pero Pharys cree que después de tanta molestia que se ha tomado debería salir al menos con un adorno para el cabello que puede que no use ni regale, a menos que le siente bien. - Gracias... Ya solo la bienvenida debería cobrarla. - Pharys suspira más como reflejo que por emoción, y mira hacia los lados a ver qué cosa puede captar su atenciónque no sea demasiado caro o que sea lo bastante bonito como para querer poseerlo y atesorarlo, a sabiendas que encontrar eso implicará algo más que la intención de comprar y se mete en el terreno de lo sentimental.
- Um... La verdad es que... He entrado porque el lugar se veía interesante. Es como un respiro entre todo el vapor y metal que inunda el ambiente. - Toma una pausa antes de seguir examinando con la mirada los objetos que se le presentan, cuando cae en cuenta que honestamente duda usar sandalias o un sombrero alguna vez en la vida, si se considera que solo por esta vez tiene algo diferente a sus ropajes de tela y botas. No quiere ser grosera tampoco y hacer esperar al dueño que tan amable la recibió, pero no podría ser mentirosa y fingir que cualquier cosa que le pase por los ojos sería lo que quisiera, eso sería deshonrar la palabra honesta de la caballería. Es entonces cuando su vista encuentra algo que no puede fallar de ninguna manera, y eso es la máquina con bocadillos que vio apenas llegaba. - Oh, ¿Qué tal una merienda con la comida almacenada en esas cajas? ¿Puedo tomar algo que no sea demasiado costoso? No tengo nada de almas para comprar nada ahora, pero si voy a quedar como una deudora quiero entonces que sea provechoso; si es un alimento, un caballero siempre devolverá lo equivalente a lo que ha tomado, incluyéndome a mí por supuesto. - Pharys recupera el semblante digno de los habitantes de Calad'Meeth, sin levantarse de su asiento, más si actuando como lo haría una portadora del título de caballera, dispuesta a hacer algo indebido y tomar toda la responsabilidad por ello. - Puede que se exceda más de lo que tengo para pagar, pero juro que retornaré la atención por tan grato saludo y tan generosa acción.
Por todas las maniobras gestuales que hace demuestra ser alguien de cultura, cosa que pone un poco más nerviosa a Pharys que intenta descifrar la palabra que ha usado el hombre. "Vaya, me ha llamado... Ma... Ma... Algo así empezaba. No tengo idea que será pero no suena a que es algo malo, en cambio parece un cumplido de esos que no creo deba recibir. Seguro es el vestido...".
- Eh... Si, entiendo mejor ese lenguaje... - Ríe con el tono característico de un gesto forzado, sin añadir otra parte de la verdad que se guarda por vergüenza y no decir directamente que nada más habla un idioma. La presentación del dueño es tan elaborada que la hace pensar si será así con todo el que entra en su tienda, y de ser afirmativo entonces todo el mundo debería comprarle aunque sea algo. No tiene que ser lo más costoso, pero Pharys cree que después de tanta molestia que se ha tomado debería salir al menos con un adorno para el cabello que puede que no use ni regale, a menos que le siente bien. - Gracias... Ya solo la bienvenida debería cobrarla. - Pharys suspira más como reflejo que por emoción, y mira hacia los lados a ver qué cosa puede captar su atención
- Um... La verdad es que... He entrado porque el lugar se veía interesante. Es como un respiro entre todo el vapor y metal que inunda el ambiente. - Toma una pausa antes de seguir examinando con la mirada los objetos que se le presentan, cuando cae en cuenta que honestamente duda usar sandalias o un sombrero alguna vez en la vida, si se considera que solo por esta vez tiene algo diferente a sus ropajes de tela y botas. No quiere ser grosera tampoco y hacer esperar al dueño que tan amable la recibió, pero no podría ser mentirosa y fingir que cualquier cosa que le pase por los ojos sería lo que quisiera, eso sería deshonrar la palabra honesta de la caballería. Es entonces cuando su vista encuentra algo que no puede fallar de ninguna manera, y eso es la máquina con bocadillos que vio apenas llegaba. - Oh, ¿Qué tal una merienda con la comida almacenada en esas cajas? ¿Puedo tomar algo que no sea demasiado costoso? No tengo nada de almas para comprar nada ahora, pero si voy a quedar como una deudora quiero entonces que sea provechoso; si es un alimento, un caballero siempre devolverá lo equivalente a lo que ha tomado, incluyéndome a mí por supuesto. - Pharys recupera el semblante digno de los habitantes de Calad'Meeth, sin levantarse de su asiento, más si actuando como lo haría una portadora del título de caballera, dispuesta a hacer algo indebido y tomar toda la responsabilidad por ello. - Puede que se exceda más de lo que tengo para pagar, pero juro que retornaré la atención por tan grato saludo y tan generosa acción.
Pharys Azure- Mensajes : 24
Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Chikao Sáb Mayo 03, 2014 4:12 pm
Chikao escuchó atentamente a la joven mencionar que le apetecía un descanso, quizás no lo había notado y era probable que la joven dama hubiera tenido que hacer un largo recorrido… por lo que luego de escucharle atentamente, le sonrió y le dijo…
-Mil disculpas! Mis modales se han vuelto un tanto, rústicos, por favor, adelante toma lo que desees de la mesa… -
E hizo nuevamente una reverencia, sonrió y ahora mirándole a la cara a la jovencita, con un gesto de su mano derecha invitando a la joven a que se sirviera lo que deseaba.
-Además, un descanso va a ser reconfortante… y más si hay alguien con quién platicar-
Lentamente, y girando en dirección al final del local, bordeó los asientos de espera, para llegar a los dispensadores, se detuvo por un momento, suspiró levantó la cabeza y le explicó la ubicación de los dispensadores, le explicó que había tanto para bebidas frías como para las calientes, en el medio una mesa, con una cajonera, donde al abrir el primer cajón, estaban ordenadas en pequeños nichos, las cucharas, como así también todo lo necesario para una infusión. Mientras tomaba un pocillo de cerámica, con una filigrana muy delicada con una mano, con la otra alcanzo el pequeño plato que acompañaba al pocillo, y luego una cuchara de metal, que a simple vista no parecía muy elaborada, pero al contacto con esta, había una gran diferencia, podía notarse casi los detalles artísticos incrustados en relieve.
-Ahjá!... Si, un té verde es lo más indicado en esta ocasión…-
Al tiempo que buscaba un sobrecito de color verde muy intenso, lo tomó entre una de sus manos, leyó la etiqueta y se dispuso a abrirlo, lo llevó a su nariz al sobre, para que los sentidos compartieran un poco de la fragancia que venía envasada en ese pequeño sobre.
Cambió el sobre de posición en sus manos, tomó el pequeño saquito de té de dentro del sobre y lo colocó dentro del pocillo, luego se dirigió al dispensador de bebidas calientes y luego de haber colocado el pocillo junto con su plato en el lugar adecuado presionó el botón con la etiqueta “Solo Agua” mientras tanto el aroma junto con el vapor del agua caliente empezaron a esparcirse por los alrededores…
“¿Por qué crees en verdad que haya aparecido esta joven…? ¿Crees que habrán llegado hasta los oídos de las autoridades que caíste desde un portal en el Santuario proveniente de vaya saber uno?? ”
“No se me ocurre de un porqué… Quizás puedas ofrecerme alguna teoría al respecto”
“Creo que está intentando averiguar…. ¡Aguarda un instante ahí mismo!!!! ¿Será posible acaso…? Si mis oídos no me fallan… “
“Querrás decir NUESTROS oidos!!!”
“Ahora es un detalle sin importancia, pero está bien… está bien NUESTROS oídos no fallan, ella dijo y cito textualmente a la joven…. ’un caballero siempre devolverá lo equivalente a lo que ha tomado’ Supongo notarás a donde intento apuntar con esto… ¿Verdad? ES UN CABALLERO FEMENINO…”
“Y caballero femenino normalmente implica órdenes de un monarca… ¿es eso lo que intentas decir…”
Mientras Chikao conversaba consigo mismo, al pocillo le faltaba muy poco, casi diríase un dedo horizontal para que esté al borde de rebalsar la medida, cuando Chikao notó esto, de inmediato soltó el botón, esperó algunos instantes para tomar el conjunto de pocillo y plato mientras hacía esto, le miró fijamente a la joven, intentando no incomodarle o intimidarle
-Permitidme le trate como si fuésemos viejos amigos. No te preocupes por el costo… Si me lo permites, y si te interesa… quizás podamos llegar a un acuerdo para que tu orgullo de caballero no sea herido-
Y con una sonrisa, sin dejar de mirarle agregó
-No te sorprendas, creo que todavía puedo reconocer a un caballero cuando le veo… No es necesario tomes juramento ante mí Maidmoiselle, me gustaría proponerte algo…-
Mientras se llevaba el pocillo a sus labios mientras le observaba…
-Para empezar, no se vuestro nombre, no lo habéis mencionado antes, por ello me veo forzado a preguntaros… ¿Quién sois vos Maidmoiselle?-
-Mil disculpas! Mis modales se han vuelto un tanto, rústicos, por favor, adelante toma lo que desees de la mesa… -
E hizo nuevamente una reverencia, sonrió y ahora mirándole a la cara a la jovencita, con un gesto de su mano derecha invitando a la joven a que se sirviera lo que deseaba.
-Además, un descanso va a ser reconfortante… y más si hay alguien con quién platicar-
Lentamente, y girando en dirección al final del local, bordeó los asientos de espera, para llegar a los dispensadores, se detuvo por un momento, suspiró levantó la cabeza y le explicó la ubicación de los dispensadores, le explicó que había tanto para bebidas frías como para las calientes, en el medio una mesa, con una cajonera, donde al abrir el primer cajón, estaban ordenadas en pequeños nichos, las cucharas, como así también todo lo necesario para una infusión. Mientras tomaba un pocillo de cerámica, con una filigrana muy delicada con una mano, con la otra alcanzo el pequeño plato que acompañaba al pocillo, y luego una cuchara de metal, que a simple vista no parecía muy elaborada, pero al contacto con esta, había una gran diferencia, podía notarse casi los detalles artísticos incrustados en relieve.
-Ahjá!... Si, un té verde es lo más indicado en esta ocasión…-
Al tiempo que buscaba un sobrecito de color verde muy intenso, lo tomó entre una de sus manos, leyó la etiqueta y se dispuso a abrirlo, lo llevó a su nariz al sobre, para que los sentidos compartieran un poco de la fragancia que venía envasada en ese pequeño sobre.
Cambió el sobre de posición en sus manos, tomó el pequeño saquito de té de dentro del sobre y lo colocó dentro del pocillo, luego se dirigió al dispensador de bebidas calientes y luego de haber colocado el pocillo junto con su plato en el lugar adecuado presionó el botón con la etiqueta “Solo Agua” mientras tanto el aroma junto con el vapor del agua caliente empezaron a esparcirse por los alrededores…
“¿Por qué crees en verdad que haya aparecido esta joven…? ¿Crees que habrán llegado hasta los oídos de las autoridades que caíste desde un portal en el Santuario proveniente de vaya saber uno?? ”
“No se me ocurre de un porqué… Quizás puedas ofrecerme alguna teoría al respecto”
“Creo que está intentando averiguar…. ¡Aguarda un instante ahí mismo!!!! ¿Será posible acaso…? Si mis oídos no me fallan… “
“Querrás decir NUESTROS oidos!!!”
“Ahora es un detalle sin importancia, pero está bien… está bien NUESTROS oídos no fallan, ella dijo y cito textualmente a la joven…. ’un caballero siempre devolverá lo equivalente a lo que ha tomado’ Supongo notarás a donde intento apuntar con esto… ¿Verdad? ES UN CABALLERO FEMENINO…”
“Y caballero femenino normalmente implica órdenes de un monarca… ¿es eso lo que intentas decir…”
Mientras Chikao conversaba consigo mismo, al pocillo le faltaba muy poco, casi diríase un dedo horizontal para que esté al borde de rebalsar la medida, cuando Chikao notó esto, de inmediato soltó el botón, esperó algunos instantes para tomar el conjunto de pocillo y plato mientras hacía esto, le miró fijamente a la joven, intentando no incomodarle o intimidarle
-Permitidme le trate como si fuésemos viejos amigos. No te preocupes por el costo… Si me lo permites, y si te interesa… quizás podamos llegar a un acuerdo para que tu orgullo de caballero no sea herido-
Y con una sonrisa, sin dejar de mirarle agregó
-No te sorprendas, creo que todavía puedo reconocer a un caballero cuando le veo… No es necesario tomes juramento ante mí Maidmoiselle, me gustaría proponerte algo…-
Mientras se llevaba el pocillo a sus labios mientras le observaba…
-Para empezar, no se vuestro nombre, no lo habéis mencionado antes, por ello me veo forzado a preguntaros… ¿Quién sois vos Maidmoiselle?-
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Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Pharys Azure Lun Mayo 05, 2014 11:39 pm
La incomodidad que pudo haber tenido en un momento se ha ido desvaneciendo con tan solo hablar. Así es ella, que con nada más hacerla mencionar a la caballería es más que suficiente para darle ánimos y confianza, aunque signifique que esté haciendo algo incorrecto, al estar obligada por su propio código a cumplir con sus deudas sin importar que se trate o que deba hacer. Eso no deja afuera a una pequeña tienda que parece desubicada si se le compara con las que le rodean, o mejor dicho con mayor razón debería tener en cuenta cualquier deuda que genere si desea retribuir el buen servicio con un próspero futuro. El hombre parece muy diligente no solo a la hora de saludar, sino también en cuanto a prestar servicio, cosa que hace sonreír a la chica al darle una visión de responsabilidad y respeto que puede respetar y remarcar como un aspecto deseable en toda persona. Pharys asiente en silencio pero firme, haciendo caso de las sugerencias del vendedor, que se ha retirado para preparar la merienda que mucho ha de valer la pena y que hará que se gane recomendaciones aunque la mayoría de sus conocidos estén lejos de Miryathir.
Pharys lo siguió para atender a todo lo que tenía para ofrecer. Bocadillos variados con distintas bebidas que llamaban la atención y era un poco difícil de elegir que quería, porque todo en efecto le gustaba y no tenía deseo de comer demasiado; tiene una figura que mantener por el bien de la imagen de la guardia personal. Prefirió dejar eso en manos del experto, reverenciando un poco hacia él y retornando hasta uno de los sillones donde habría de pensar en varias cosas. Una de ellas, el hecho de que en verdad el té no le gusta como bebida, pero sí la compañía con la que se puede compartir. Además, no quiere importunar demasiado al hombre que se está tomando tantas molestias, cuando lo más fácil pudo haber sido hacerla salir de la tienda. "Es bueno encontrar gente buena", pensó, acomodando la sombrilla sobre su regazo y deteniéndose a verla con más detalle, notando que tiene figurillas de peces muy bien disimuladas sobre la tela.
Pharys vuelve a pasear la vista por todo el local, casi parecida a una infante que intenta encontrar alguna cosa que no haya visto antes, o que si llegó a ver pero no le puso el interés que se necesita para que pudiese captar lo que le hace valioso. De no ser por la instrucción que recibió en el palacio de Calad'Meeth, pensaría que todo es solo chatarra sobre chatarra que bien podría vender por algo de dinero a los mercaderes ilegales en el puerto o regalarlas a su madre por pura decoración. Habrá que visitar dentro de unos cuantos meses para saber qué tal le va, porque él parece interesado en ella por su manera de hablar e incluso de mirarla. Como parte de la caballería, siempre debe mantenerse alerta y lista para un duelo sin importar en donde y contra quién sea, en este caso un hombre cuya fija mirada choca contra los ojos azules de Pharys, que inmediatamente responde con la misma fijación y dureza que no debe percibirse en ninguna otra parte de su cuerpo más que en su forma de mirar. Es algo que sabe mejor que nada, que aquello que te mira directo debe ser mirado de la misma manera, sin perder contacto ni un poco, porque de igual forma la vista se desvía, lo hace también la espada.
- ¿Y que sería ese acuerdo? Espero sea suficiente al gasto que ocasionaré. - Su voz surgió tan natural como en un principio la mantuvo, más con la soltura que demanda el hecho de mantener contacto visual y atacar con mayor firmeza en su mirada. Su cuerpo no está ni un poco tenso, más está lista para enfrentarlo de ser necesario, sin pensar en que pueda estar exagerando y la expresión sombría del hombre solo es a causa de su sombrero. Su razonamiento viene del hecho de que no lo conoce y no puede confiar ciegamente en él, más no hace absolutamente nada mientras el habla y explica sus motivos. - Es necesario para mí tomar juramentos. Si me reconoce como caballera, sabrá que no puedo decir que no a mi palabra o responsabilidades. - Debe hablar de eso, porque el hecho de vivir y hablar ya es una responsabilidad, como todo lo que durante el día transcurra y el día de mañana debe ser recordado.
Al momento en que debe responder la pregunta de aquel hombre, se coloca de pie tranquila y sostiene su sombrilla por el asidero de la misma con su mano izquierda. Fijo y directo a sus ojos, denota el orgullo de la caballería en sus siguientes palabras. - Mi nombre es Pharys Azure de Calad'Meeth, guardia personal de su alteza la diosa viviente. El código de la caballería exige que la presentación de un nombre debe ser seguida por otra presentación. Por honor, debería usted mencionar el suyo aunque no sea un caballero. - No ha de ocupar su asiento todavía mientras tenga cosas que preguntar y voz para continuar. - Dígame usted, ¿qué necesidad hay de saber esta información? Y me temo que debo ser descortés y severa al preguntar, habiendo tanto filo en su mirada. Disculpe mi rudeza. - En ese momento tiene verdaderas ganas de suspirar y relajarse, pero preferible esperar a que el ambiente se suavice por si solo y que luego ella deba castigarse por ser tan impulsiva y no dejar que su mejor cara sea la que otros deban apreciar. Quisiera que todo fuese un malentendido de su parte y vuelva a sentarse para reír como tonta y sintiéndose como una.
Pharys lo siguió para atender a todo lo que tenía para ofrecer. Bocadillos variados con distintas bebidas que llamaban la atención y era un poco difícil de elegir que quería, porque todo en efecto le gustaba y no tenía deseo de comer demasiado; tiene una figura que mantener por el bien de la imagen de la guardia personal. Prefirió dejar eso en manos del experto, reverenciando un poco hacia él y retornando hasta uno de los sillones donde habría de pensar en varias cosas. Una de ellas, el hecho de que en verdad el té no le gusta como bebida, pero sí la compañía con la que se puede compartir. Además, no quiere importunar demasiado al hombre que se está tomando tantas molestias, cuando lo más fácil pudo haber sido hacerla salir de la tienda. "Es bueno encontrar gente buena", pensó, acomodando la sombrilla sobre su regazo y deteniéndose a verla con más detalle, notando que tiene figurillas de peces muy bien disimuladas sobre la tela.
Pharys vuelve a pasear la vista por todo el local, casi parecida a una infante que intenta encontrar alguna cosa que no haya visto antes, o que si llegó a ver pero no le puso el interés que se necesita para que pudiese captar lo que le hace valioso. De no ser por la instrucción que recibió en el palacio de Calad'Meeth, pensaría que todo es solo chatarra sobre chatarra que bien podría vender por algo de dinero a los mercaderes ilegales en el puerto o regalarlas a su madre por pura decoración. Habrá que visitar dentro de unos cuantos meses para saber qué tal le va, porque él parece interesado en ella por su manera de hablar e incluso de mirarla. Como parte de la caballería, siempre debe mantenerse alerta y lista para un duelo sin importar en donde y contra quién sea, en este caso un hombre cuya fija mirada choca contra los ojos azules de Pharys, que inmediatamente responde con la misma fijación y dureza que no debe percibirse en ninguna otra parte de su cuerpo más que en su forma de mirar. Es algo que sabe mejor que nada, que aquello que te mira directo debe ser mirado de la misma manera, sin perder contacto ni un poco, porque de igual forma la vista se desvía, lo hace también la espada.
- ¿Y que sería ese acuerdo? Espero sea suficiente al gasto que ocasionaré. - Su voz surgió tan natural como en un principio la mantuvo, más con la soltura que demanda el hecho de mantener contacto visual y atacar con mayor firmeza en su mirada. Su cuerpo no está ni un poco tenso, más está lista para enfrentarlo de ser necesario, sin pensar en que pueda estar exagerando y la expresión sombría del hombre solo es a causa de su sombrero. Su razonamiento viene del hecho de que no lo conoce y no puede confiar ciegamente en él, más no hace absolutamente nada mientras el habla y explica sus motivos. - Es necesario para mí tomar juramentos. Si me reconoce como caballera, sabrá que no puedo decir que no a mi palabra o responsabilidades. - Debe hablar de eso, porque el hecho de vivir y hablar ya es una responsabilidad, como todo lo que durante el día transcurra y el día de mañana debe ser recordado.
Al momento en que debe responder la pregunta de aquel hombre, se coloca de pie tranquila y sostiene su sombrilla por el asidero de la misma con su mano izquierda. Fijo y directo a sus ojos, denota el orgullo de la caballería en sus siguientes palabras. - Mi nombre es Pharys Azure de Calad'Meeth, guardia personal de su alteza la diosa viviente. El código de la caballería exige que la presentación de un nombre debe ser seguida por otra presentación. Por honor, debería usted mencionar el suyo aunque no sea un caballero. - No ha de ocupar su asiento todavía mientras tenga cosas que preguntar y voz para continuar. - Dígame usted, ¿qué necesidad hay de saber esta información? Y me temo que debo ser descortés y severa al preguntar, habiendo tanto filo en su mirada. Disculpe mi rudeza. - En ese momento tiene verdaderas ganas de suspirar y relajarse, pero preferible esperar a que el ambiente se suavice por si solo y que luego ella deba castigarse por ser tan impulsiva y no dejar que su mejor cara sea la que otros deban apreciar. Quisiera que todo fuese un malentendido de su parte y vuelva a sentarse para reír como tonta y sintiéndose como una.
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Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Chikao Jue Mayo 08, 2014 2:34 pm
Chikao, por un momento pensó que quizás gustara una taza de té a la joven, pero luego de un instante, habiéndolo pensado más detenidamente, dejaría esa taza para el para quizás más tarde antes de cerrar la tienda. Le interrumpió un fuerte pensamiento, como solía hacer todos y cada uno de ellos.
“¿Es que acaso le has visto cara de…? a mí me gusta el té verde, y su suave sabor a pasto del jardín… No, observa mejor, por lo visto no te has recuperado por completo… No tiene la edad, ni la experiencia como para que le agrade el té… obsérvale mejor y notarás que la niña es casi una golosina… ¿Quizás de ananá? ¿Frutilla tal vez?... Prueba de ofrecerle una taza de Chocolate caliente”
“Hmmmm… Como eres de inoportuno… Pero si, puede que tengas razón en algo”
“Ohh Vaya, que es eso en el piso, un trozo de tu cuerpo…? Espera, quiero ver si ahora es cuando aparece NUESTRO Padre y te sermonea por no confiar en mí, eso haría MUY FELIZ mi día… El verte sermoneado por Padre… de solo pensarlo…”
“Eso es TAAAN TÚ… ¡Ya estaba pensando en eso!”
-Voy a pediros aguardéis un momento, mientras preparo vuestra infusión… ¿Os apetecería quizás una taza de chocolate caliente?-
Mientras giraba nuevamente y se dirigía hacia el cajón de donde había sacado el té verde, hacía algunos momentos, no sabía si fuera a aceptar el chocolate caliente en taza, pero no perdía nada al intentarlo. Al tiempo que preparaba la infusión, y luego de cerrar los ojos por un momento, con la cabeza baja, le dijo a la joven Pharys.
-Es un honor conocerle joven Pharys Azure de Calad'Meeth, Thuban Chikao Hiratasuka a su servicio; General del Ejército del Reino del Este, Almirante General del Este; Capitán General de la orden Hijos del Cielo, al Servicio de Su Majestad.-
Hizo un breve silencio, para luego agregar…
-Pero aquí, en este lugar… Soy solo el propietario de la tienda que tenéis ante vuestros ojos, pero pierde cuidado, puedes decime como prefieras, Chikao o si prefieres algo más formal, Thuban…-
Ahora, ya lista la infusión para Pharys, dio media vuelta, apuntó hacia donde estaba la joven con la taza de chocolate, con ambas manos extendiéndolas en dirección de ella, le dijo
-Pregunté por tu nombre, puesto que tienes cierta remembranza con alguien a quién conocí, y con quién compartí, heridas, golosinas, campos de batallas, y sin embargo siempre conservaba el aspecto de una pequ-… de una guerrera, justo como tu hace unos momentos, cuando cambiaste tu postura, y luego cuando pronunciasteis tu juramento, has traído a este antiguo… Ser, algo que hace que los huesos se sientan bien una vez más… Aún en tierras extrañas lejos de lo que has amado, y por todo aquello por lo que algún día luchaste.-
Sin dejar de sonreír… Chikao mirando ahora en dirección de las cajas y luego observándole más detenidamente le respondió otra pregunta que había quedado flotando en el aire, lanzada por Pharys.
-Esta información es necesaria, puesto que deseaba saber si eras digna de ser depositaria de tal información que acabas de recibir, y por la que estás a punto de recibir también, es por ello que lo pregunté…-
Se movió hacía donde estaban los dulces y cargó en un pequeño plato, cantidad variada de ellos y se los dejó ante Pharys.
-Puedes tomar los que desees… Respecto del contenido de las cajas, os lo diré, no tiene caso lo oculte, vuestro honor de caballero impedirá lo divulguéis a menos sea una emergencia para tu Señor, tu territorio o tu propia vida. Son armas experimentales, o al menos lo eran en donde yo habitaba…-
Lanzando un suspiro, y acomodándose el sombrero hacia delante, Chikao agregó
-Se supone que solo existen en la imaginación colectiva y no en la realidad, son parte de un proyecto que dirigía, lo que ves aquí es solo lo que traía conmigo cuando aparecí aquí, hay una pieza más, Mi armadura…-
Mirándole fijamente a los ojos, buscando encontrar una respuesta, de preferencia afirmativa… lanzó, una vez más, la pregunta sobre Pharys…
-Dime Joven Pharys… ¿Sabéis de algún lugar donde el flujo mágico sea poderoso? Debe de ser tan poderoso como para traer a la realidad tus pensamientos-
Esperando le respondiera… agregó
-El acuerdo es el siguiente… Llévame al lugar que sepas que la magia es más fuerte que en el resto, eliges el arma que más os guste, el entrenamiento, como la munición corren por cuenta de la casa-
“¿Es que acaso le has visto cara de…? a mí me gusta el té verde, y su suave sabor a pasto del jardín… No, observa mejor, por lo visto no te has recuperado por completo… No tiene la edad, ni la experiencia como para que le agrade el té… obsérvale mejor y notarás que la niña es casi una golosina… ¿Quizás de ananá? ¿Frutilla tal vez?... Prueba de ofrecerle una taza de Chocolate caliente”
“Hmmmm… Como eres de inoportuno… Pero si, puede que tengas razón en algo”
“Ohh Vaya, que es eso en el piso, un trozo de tu cuerpo…? Espera, quiero ver si ahora es cuando aparece NUESTRO Padre y te sermonea por no confiar en mí, eso haría MUY FELIZ mi día… El verte sermoneado por Padre… de solo pensarlo…”
“Eso es TAAAN TÚ… ¡Ya estaba pensando en eso!”
-Voy a pediros aguardéis un momento, mientras preparo vuestra infusión… ¿Os apetecería quizás una taza de chocolate caliente?-
Mientras giraba nuevamente y se dirigía hacia el cajón de donde había sacado el té verde, hacía algunos momentos, no sabía si fuera a aceptar el chocolate caliente en taza, pero no perdía nada al intentarlo. Al tiempo que preparaba la infusión, y luego de cerrar los ojos por un momento, con la cabeza baja, le dijo a la joven Pharys.
-Es un honor conocerle joven Pharys Azure de Calad'Meeth, Thuban Chikao Hiratasuka a su servicio; General del Ejército del Reino del Este, Almirante General del Este; Capitán General de la orden Hijos del Cielo, al Servicio de Su Majestad.-
Hizo un breve silencio, para luego agregar…
-Pero aquí, en este lugar… Soy solo el propietario de la tienda que tenéis ante vuestros ojos, pero pierde cuidado, puedes decime como prefieras, Chikao o si prefieres algo más formal, Thuban…-
Ahora, ya lista la infusión para Pharys, dio media vuelta, apuntó hacia donde estaba la joven con la taza de chocolate, con ambas manos extendiéndolas en dirección de ella, le dijo
-Pregunté por tu nombre, puesto que tienes cierta remembranza con alguien a quién conocí, y con quién compartí, heridas, golosinas, campos de batallas, y sin embargo siempre conservaba el aspecto de una pequ-… de una guerrera, justo como tu hace unos momentos, cuando cambiaste tu postura, y luego cuando pronunciasteis tu juramento, has traído a este antiguo… Ser, algo que hace que los huesos se sientan bien una vez más… Aún en tierras extrañas lejos de lo que has amado, y por todo aquello por lo que algún día luchaste.-
Sin dejar de sonreír… Chikao mirando ahora en dirección de las cajas y luego observándole más detenidamente le respondió otra pregunta que había quedado flotando en el aire, lanzada por Pharys.
-Esta información es necesaria, puesto que deseaba saber si eras digna de ser depositaria de tal información que acabas de recibir, y por la que estás a punto de recibir también, es por ello que lo pregunté…-
Se movió hacía donde estaban los dulces y cargó en un pequeño plato, cantidad variada de ellos y se los dejó ante Pharys.
-Puedes tomar los que desees… Respecto del contenido de las cajas, os lo diré, no tiene caso lo oculte, vuestro honor de caballero impedirá lo divulguéis a menos sea una emergencia para tu Señor, tu territorio o tu propia vida. Son armas experimentales, o al menos lo eran en donde yo habitaba…-
Lanzando un suspiro, y acomodándose el sombrero hacia delante, Chikao agregó
-Se supone que solo existen en la imaginación colectiva y no en la realidad, son parte de un proyecto que dirigía, lo que ves aquí es solo lo que traía conmigo cuando aparecí aquí, hay una pieza más, Mi armadura…-
Mirándole fijamente a los ojos, buscando encontrar una respuesta, de preferencia afirmativa… lanzó, una vez más, la pregunta sobre Pharys…
-Dime Joven Pharys… ¿Sabéis de algún lugar donde el flujo mágico sea poderoso? Debe de ser tan poderoso como para traer a la realidad tus pensamientos-
Esperando le respondiera… agregó
-El acuerdo es el siguiente… Llévame al lugar que sepas que la magia es más fuerte que en el resto, eliges el arma que más os guste, el entrenamiento, como la munición corren por cuenta de la casa-
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Localización : Frente a la plaza de los inventos, en mi humilde local
Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Pharys Azure Sáb Mayo 10, 2014 10:37 pm
En primer lugar no sabía por dónde empezar a enumerar las cosas. Primero se sintió avergonzada, luego acosada, después un poco más aliviada, y espera que luego no tenga que sentirse tonta aunque admita que en varias oportunidades termina siéndolo. Sin duda ha sido imprudente, o muy impulsiva la verdad, culpable de que ahora sus emociones son más libres que nunca gracias al caos que ha despertado en ella hace solo pocos años. No se puede comparar con los que ya llevan siglos de vida, como los reyes, que conocen los secretos de esa fuerza de la que provienen los sentimientos y las libertades, y que por profundo agradecimiento decidió empeñar sus privilegios en ser la mejor de los caballeros, aunque no pueda formar parte del ejército. Uno de los aspectos por los que se deja llevar y la colocan en situaciones algo incomodas y de las que ella es responsable, sintiendo la necesidad de estar alerta siempre hasta que no pueda confiar por completo en alguien, pero sabe que debería ser siempre amable y honorable hasta con aquel que demuestre ser el peor enemigo. En ese punto, siente que ha sido irrespetuosa de verdad, porque no esperaba que el hombre adivinase tan bien que sus gustos no son nada refinados y que en el fondo es solo una niña. Al nombrar la palabra chocolate, sus ojos se agrandaron un poco y de inmediato exclamó sin pensar dos veces siquiera. - ¡Oh! ¡Me gusta el chocolate! - Predecible reacción, y la que la sigue también, que es cubrirse la boca con una mano, avergonzada por exclamar de ese modo sin mantener la postura educada que una señorita debe tener.
- Lo siento... No debí hacer eso... - Pharys se muestra apenada en verdad, con un rubor que la delata y una risa nerviosa que apenas logra disimular. En momentos como ese de verdad le gustaría tener un casco como su rey para que nadie pueda ver cómo lleva tan mal la pena de una niñería. Decidió guardar silencio y escuchar a la completa presentación del vendedor, que le quitó un poco la sensación de desubicada que tenía y llamó la atención en totalidad, cuando dijo la palabra "General". Su porte cambió ante el individuo, al que le cree cada palabra por el hecho de que un caballero no mentiría nunca, ni un mentiroso diría jamás que es un caballero.
- El honor es mío, señor Thuban. Y no importa si es usted un vendedor en estas tierras. Nunca se renuncia a su título aunque no se esté en batalla, porque siempre se está en servicio. Si no fuera así, no recordaría ni su herencia ni su rango. - Pharys sale en rescate del honor de ese hombre, antes de que continuase degradando su propia condición de general con lo que parecía ser nostalgia y soledad. Si estaba hablando de los reinos del este, solo podía pensar en uno en particular donde el nombre Chikao Hiratasuka fuese algo adecuado, y eso era el shogunato de Nara, extinguido por la guerra contra Miryathir. Asociar por adelantado esa posibilidad le ha hecho cambiar su opinión y por mucho, pensando en que todo lo que dice es verdad y ahora seguro vive bajo nombres que lo mantengan en anonimato. Seguro ya no le queda nada más que el recuerdo de glorias pasadas que vuelven a él de vez en cuando, como esa comparación que hizo de ella con una conocida que lo acompaño en batallas. Pero no siente lástima, porque eso sería humillar la memoria de sus muertos y la de su derrota, ni tampoco cometerá otra imprudencia como preguntarle cosas sobre su escape y su asilo secreto aquí en el reino que justamente acabó con el suyo. Aunque le parece extraño que se haya sincerado de ese modo ante una sierva de Calad'Meeth, que podría delatarlo... Eso, o sabe bien que el código de un caballero impide que se tome ventaja de alguien en su peor momento y en efecto confía de todo corazón en ella. Pharys piensa mucho, pero lo hace por bien.
- Puede confiar en mí. No le delataré bajo ningún concepto. Además la guerra se ha terminado... Ya toda la mala sangre debería dejarse correr hasta que desaparezca. - Su rey apremiaría esa respuesta, pero su reina la reprocharía con sutileza y ternura, diciéndole algo como "Todos tienen la posibilidad de elegir lo que quieran sentir".
Las siguientes palabras del hombre fueron como una adivinanza con las que no era precisamente buena, y poco la verdad entendió de lo que le quiso decir, nada más hasta que preguntó sobre un lugar que fuese lo bastante especial como para que lo describiera de ese modo. Pharys parece pensativa, y se sienta de nuevo en el sillón para poder disfrutar del chocolate caliente, hirviendo si se puede decir, tal como le gusta disfrutarlo. Deja sobre el plato la taza que ha dejado de un solo sorbo ya por la mitad, y con una servilleta se limpia adecuadamente la boca antes de responder. - Hay muchos lugares como ese en todo nuestro continente. Cada reino tiene un lugar donde la magia fluye con más facilidad, por cosas que le hizo el caos a nuestro mundo hace años. En Kil'Daggoth le podrían explicar mejor de todo eso, confieso que no sé nada de esa arte... - No es como la música o la espada, artes que ella llamaría "Reales" y que es accesible para todo el que desee aprender, si se esfuerza lo suficiente y es disciplinado en ello. Las cosas mágicas en cambio, son para personas muy selectas y que están dispuestas a sacrificar cosas para lograr otras que según ella no tienen valor. - Si... Ese reino de hechiceros debe ser donde los flujos de energía mágica sean muy poderosos, la gente de ahí trabaja en base a eso, igual que en Miryathir se trabaja sobre el metal, y en Calad'Meeth trabajamos sobre el crecimiento de nuestra gente.
Pero no es ese el lugar donde la energía sea definitiva. Existe otro sitio donde las cosas son muy diferentes, y con un suspiro se preparar para hacer mención del mismo, aunque hoy en día todo el mundo lo conoce. - Sin embargo Kil'Daggoth no creo que supere a un lugar donde se dice que puede ocurrir todo, hasta lo imposible, lo que vive en nuestros sueños, y es un lugar que usted debe conocer. - Sería lógico, porque de alguna forma debió atravesar desde sus tierras hasta este continente... Y la única forma de que eso sea posible es viajando a través de... - El Nexo. Desde el Vínculo Mundial se pueden hacer toda clase de viajes, como también los mercados más importantes están ahí, los salones de entrenamiento, el fuerte que evita que desde sus Páramos los monstruos destruyan el Vínculo. Ya después de ese lugar neutral vienen los Páramos del Nexo... Donde ya es demasiado peligroso intentar establecer fuertes. - Toma de nuevo la taza entre sus manos y termina de beberla en pocos sorbos, feliz de probar un chocolate caliente como ese sin importarle ni un poquito el calor que hay en Excelsus. Toma un dulce y lo come como la delicia que es, antes de limpiarse con una servilleta de nuevo. - Ir al Nexo es un entrenamiento, pelear contra monstruos y obtener almas para comerciar o usarlas para incrementar el poder de la propia alma es la vía del fuerte. Es donde la magia es más poderosa y pasa lo inaudito... Y bueno, es donde está el Señor Oscuro, aunque nadie lo ha visto en años. No me atrevo a ir sola, pero si fuese a acompañarlo como agradecimiento, me sentiría honrada.
- Lo siento... No debí hacer eso... - Pharys se muestra apenada en verdad, con un rubor que la delata y una risa nerviosa que apenas logra disimular. En momentos como ese de verdad le gustaría tener un casco como su rey para que nadie pueda ver cómo lleva tan mal la pena de una niñería. Decidió guardar silencio y escuchar a la completa presentación del vendedor, que le quitó un poco la sensación de desubicada que tenía y llamó la atención en totalidad, cuando dijo la palabra "General". Su porte cambió ante el individuo, al que le cree cada palabra por el hecho de que un caballero no mentiría nunca, ni un mentiroso diría jamás que es un caballero.
- El honor es mío, señor Thuban. Y no importa si es usted un vendedor en estas tierras. Nunca se renuncia a su título aunque no se esté en batalla, porque siempre se está en servicio. Si no fuera así, no recordaría ni su herencia ni su rango. - Pharys sale en rescate del honor de ese hombre, antes de que continuase degradando su propia condición de general con lo que parecía ser nostalgia y soledad. Si estaba hablando de los reinos del este, solo podía pensar en uno en particular donde el nombre Chikao Hiratasuka fuese algo adecuado, y eso era el shogunato de Nara, extinguido por la guerra contra Miryathir. Asociar por adelantado esa posibilidad le ha hecho cambiar su opinión y por mucho, pensando en que todo lo que dice es verdad y ahora seguro vive bajo nombres que lo mantengan en anonimato. Seguro ya no le queda nada más que el recuerdo de glorias pasadas que vuelven a él de vez en cuando, como esa comparación que hizo de ella con una conocida que lo acompaño en batallas. Pero no siente lástima, porque eso sería humillar la memoria de sus muertos y la de su derrota, ni tampoco cometerá otra imprudencia como preguntarle cosas sobre su escape y su asilo secreto aquí en el reino que justamente acabó con el suyo. Aunque le parece extraño que se haya sincerado de ese modo ante una sierva de Calad'Meeth, que podría delatarlo... Eso, o sabe bien que el código de un caballero impide que se tome ventaja de alguien en su peor momento y en efecto confía de todo corazón en ella. Pharys piensa mucho, pero lo hace por bien.
- Puede confiar en mí. No le delataré bajo ningún concepto. Además la guerra se ha terminado... Ya toda la mala sangre debería dejarse correr hasta que desaparezca. - Su rey apremiaría esa respuesta, pero su reina la reprocharía con sutileza y ternura, diciéndole algo como "Todos tienen la posibilidad de elegir lo que quieran sentir".
Las siguientes palabras del hombre fueron como una adivinanza con las que no era precisamente buena, y poco la verdad entendió de lo que le quiso decir, nada más hasta que preguntó sobre un lugar que fuese lo bastante especial como para que lo describiera de ese modo. Pharys parece pensativa, y se sienta de nuevo en el sillón para poder disfrutar del chocolate caliente, hirviendo si se puede decir, tal como le gusta disfrutarlo. Deja sobre el plato la taza que ha dejado de un solo sorbo ya por la mitad, y con una servilleta se limpia adecuadamente la boca antes de responder. - Hay muchos lugares como ese en todo nuestro continente. Cada reino tiene un lugar donde la magia fluye con más facilidad, por cosas que le hizo el caos a nuestro mundo hace años. En Kil'Daggoth le podrían explicar mejor de todo eso, confieso que no sé nada de esa arte... - No es como la música o la espada, artes que ella llamaría "Reales" y que es accesible para todo el que desee aprender, si se esfuerza lo suficiente y es disciplinado en ello. Las cosas mágicas en cambio, son para personas muy selectas y que están dispuestas a sacrificar cosas para lograr otras que según ella no tienen valor. - Si... Ese reino de hechiceros debe ser donde los flujos de energía mágica sean muy poderosos, la gente de ahí trabaja en base a eso, igual que en Miryathir se trabaja sobre el metal, y en Calad'Meeth trabajamos sobre el crecimiento de nuestra gente.
Pero no es ese el lugar donde la energía sea definitiva. Existe otro sitio donde las cosas son muy diferentes, y con un suspiro se preparar para hacer mención del mismo, aunque hoy en día todo el mundo lo conoce. - Sin embargo Kil'Daggoth no creo que supere a un lugar donde se dice que puede ocurrir todo, hasta lo imposible, lo que vive en nuestros sueños, y es un lugar que usted debe conocer. - Sería lógico, porque de alguna forma debió atravesar desde sus tierras hasta este continente... Y la única forma de que eso sea posible es viajando a través de... - El Nexo. Desde el Vínculo Mundial se pueden hacer toda clase de viajes, como también los mercados más importantes están ahí, los salones de entrenamiento, el fuerte que evita que desde sus Páramos los monstruos destruyan el Vínculo. Ya después de ese lugar neutral vienen los Páramos del Nexo... Donde ya es demasiado peligroso intentar establecer fuertes. - Toma de nuevo la taza entre sus manos y termina de beberla en pocos sorbos, feliz de probar un chocolate caliente como ese sin importarle ni un poquito el calor que hay en Excelsus. Toma un dulce y lo come como la delicia que es, antes de limpiarse con una servilleta de nuevo. - Ir al Nexo es un entrenamiento, pelear contra monstruos y obtener almas para comerciar o usarlas para incrementar el poder de la propia alma es la vía del fuerte. Es donde la magia es más poderosa y pasa lo inaudito... Y bueno, es donde está el Señor Oscuro, aunque nadie lo ha visto en años. No me atrevo a ir sola, pero si fuese a acompañarlo como agradecimiento, me sentiría honrada.
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Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Chikao Dom Mayo 18, 2014 5:59 pm
Chikao observó detenidamente la reacción de Pharys al chocolate… Podría decirse que casi su olfato al detectarlo, le hizo saber al resto del cuerpo que había chocolate aproximándose en su dirección…
“Y yo que pensé que ella era la única que podría reaccionar de esta manera… Pero no, heme aquí, un universo dimensional de distancia, y aquí esta joven, tiene la misma reacción que ella… ¿Podría ser que de alguna manera están ligadas…?”
-Ten cuidado, podrías quemarte… Está caliente, aunque sea demasiado rico para tomarlo despacio…-
Aunque al parecer, la advertencia llegó desfasado en el tiempo, y de un solo sorbo la joven Pharys, consumió hasta la mitad de la medida que le habían servido.
Un rubor suave, se hizo presente en la joven, indicando quizás un poco de vergüenza.
-No os preocupéis, no ha pasado nada joven Pharys… Vuestro secreto quedará encerrado en este lugar-
Le respondió Chikao con una sonrisa. Las palabras de Pharys le hicieron recordar a sus compañeros, los momentos compartidos en la Fortaleza… las fogatas y las misiones de las cuales no pensaron salir ilesos…
-No podría aunque lo deseara Joven Pharys… Vera, estoy cumpliendo un juramento, mi valor de mi palabra me hace continuar adelante, de una manera similar a vuestro código de Caballeros-
Lo que dijo Pharys de la sangre derramada, continuó y revivió ciertos recuerdos que pensó estaban sellados.
-Desafortunadamente Pharys, un alto precio se ha tenido que pagar por esta paz. Obtuve muchas buenas victorias y desarrollé otras interesantes habilidades que no sé si todavía las tenga, no he podido poner a prueba eso.-
Respondió Chikao, y escuchando atentamente lo que Pharys mencionaba al respecto de la magia
“Por lo visto hay una estructura similar… ¿Pasajes entre lugares…? ¿Podrá ser posible que se pueda hacer un puente entre dos lugares sin tener que pasar por este… Nexo?”
“No lo digas, estás intentando recrear el pozo ese… ¿verdad? A que si…. Jajajajaja…. ¿piensas que puedes lograrlo?”
“Si sabes lo que te conviene… dejarás el diálogo en este momento, y en ese lugar…”
“Y que es lo que vas a hacer… ¿Exorcisarme??? Somos parte de un mismo ser… mal que te pese..”
“No, exorcizarte no, voy a darte el tratamiento del hielo…”
Mientras Chikao mantenía este debate interno, escuchaba a Pharys… Le escuchó en un punto comentar
“Ir al Nexo es un entrenamiento, pelear contra monstruos y obtener almas para comerciar o usarlas para incrementar el poder de la propia alma es la vía del fuerte. Es donde la magia es más poderosa y pasa lo inaudito... Y bueno, es donde está el Señor Oscuro, aunque nadie lo ha visto en años. No me atrevo a ir sola…”
Luego de lo dicho por Pharys, Chikao mirándole a los ojos y rozando seguridad, ahora casi convertida en fe… le respondió
-Es ahí donde seguramente deba ir, y si el Cielo lo propicia, muy probablemente seremos compañeros de campaña-
Se retiró hacia una improvisada puerta de depósito del lado opuesto a los sillones para la espera, giró la cabeza un poco, y mirándole a Pharys le preguntó…
-¿Eres del espada y escudo? O ¿Eres del tipo de muchacha que le gusta que sus armas sean parte de su armadura? Si me acompañas hasta el depósito, tomarás el arma que desees… Espero encuentres la que deseas-
“Y yo que pensé que ella era la única que podría reaccionar de esta manera… Pero no, heme aquí, un universo dimensional de distancia, y aquí esta joven, tiene la misma reacción que ella… ¿Podría ser que de alguna manera están ligadas…?”
-Ten cuidado, podrías quemarte… Está caliente, aunque sea demasiado rico para tomarlo despacio…-
Aunque al parecer, la advertencia llegó desfasado en el tiempo, y de un solo sorbo la joven Pharys, consumió hasta la mitad de la medida que le habían servido.
Un rubor suave, se hizo presente en la joven, indicando quizás un poco de vergüenza.
-No os preocupéis, no ha pasado nada joven Pharys… Vuestro secreto quedará encerrado en este lugar-
Le respondió Chikao con una sonrisa. Las palabras de Pharys le hicieron recordar a sus compañeros, los momentos compartidos en la Fortaleza… las fogatas y las misiones de las cuales no pensaron salir ilesos…
-No podría aunque lo deseara Joven Pharys… Vera, estoy cumpliendo un juramento, mi valor de mi palabra me hace continuar adelante, de una manera similar a vuestro código de Caballeros-
Lo que dijo Pharys de la sangre derramada, continuó y revivió ciertos recuerdos que pensó estaban sellados.
-Desafortunadamente Pharys, un alto precio se ha tenido que pagar por esta paz. Obtuve muchas buenas victorias y desarrollé otras interesantes habilidades que no sé si todavía las tenga, no he podido poner a prueba eso.-
Respondió Chikao, y escuchando atentamente lo que Pharys mencionaba al respecto de la magia
“Por lo visto hay una estructura similar… ¿Pasajes entre lugares…? ¿Podrá ser posible que se pueda hacer un puente entre dos lugares sin tener que pasar por este… Nexo?”
“No lo digas, estás intentando recrear el pozo ese… ¿verdad? A que si…. Jajajajaja…. ¿piensas que puedes lograrlo?”
“Si sabes lo que te conviene… dejarás el diálogo en este momento, y en ese lugar…”
“Y que es lo que vas a hacer… ¿Exorcisarme??? Somos parte de un mismo ser… mal que te pese..”
“No, exorcizarte no, voy a darte el tratamiento del hielo…”
Mientras Chikao mantenía este debate interno, escuchaba a Pharys… Le escuchó en un punto comentar
“Ir al Nexo es un entrenamiento, pelear contra monstruos y obtener almas para comerciar o usarlas para incrementar el poder de la propia alma es la vía del fuerte. Es donde la magia es más poderosa y pasa lo inaudito... Y bueno, es donde está el Señor Oscuro, aunque nadie lo ha visto en años. No me atrevo a ir sola…”
Luego de lo dicho por Pharys, Chikao mirándole a los ojos y rozando seguridad, ahora casi convertida en fe… le respondió
-Es ahí donde seguramente deba ir, y si el Cielo lo propicia, muy probablemente seremos compañeros de campaña-
Se retiró hacia una improvisada puerta de depósito del lado opuesto a los sillones para la espera, giró la cabeza un poco, y mirándole a Pharys le preguntó…
-¿Eres del espada y escudo? O ¿Eres del tipo de muchacha que le gusta que sus armas sean parte de su armadura? Si me acompañas hasta el depósito, tomarás el arma que desees… Espero encuentres la que deseas-
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por Pharys Azure Mar Mayo 20, 2014 2:28 pm
El chocolate en serio estaba caliente, lo suficiente para quemar si así se le permitiese, justo como gustaba más desde el punto de vista de aquellos que de verdad se llaman adictos a esta bebida, o esa era la concepción que Pharys le daba al hecho de tomarla y más si se trataba de una taza servida con solo gratitud, lo cual considera es un gesto mucho más valioso que varias cosas materiales. No tarda nada en consumir toda la porción, con el único inconveniente de que le gustaría tener más, pero sabe que eso no solo sería aprovecharse sino también muy descortés y poco educado, por lo que se siente conforme y contenta con lo que ha tenido; no todos los días se puede disfrutar de algo así, y para cuando se da cuenta de lo peligroso que ha sido aceptar algo de un extraño, sus sospechas se ven opacadas por otros hechos mucho más importantes, como lo es la honestidad de un hombre al admitir un pasado desagradable y reconocerse a sí mismo como un soldado en exilio forzoso.
Pensativa queda ahora la guerrera, quien no prueba más bocado porque ya rozaría lo indecoroso por muy provocativos que puedan ser los dulces tan bien puestos sobre la mesa. En cambio, prefiere meditar consigo misma sobre esa resolución tan pronta que acaba de tener tanto ella como el extranjero, sobre esa intención de ir al Nexo en búsqueda de una respuesta. Hay varios lugares del mismo donde seguro se puede encontrar lo que se busca, pero también es una dimensión aislada donde el final de la vida está a la vuelta de la esquina, sin problema alguno de eso que dicen que aquellos que siguen al caos en su totalidad son inmortales... Claro está, nadie tiene más autoridad que el caos mismo, y ese es el que reside y gobierna en el misterioso y oscuro Nexo.
- Debo advertirle, que no creo que sea buena idea adentrarse demasiado en el Nexo. No temo acompañarle en ese viaje, pero muchas de sus respuestas puede que las encuentre en el Vínculo Mundial sin tener que exponerse tanto a riesgos. Caminar por los Páramos puede ser gratificante hasta cierto punto... Porque después del fuerte, mientras más andemos, menos garantizada está nuestra seguridad. - ¿Cuantos guerreros no han quedado perdidos por siempre entre esas extensiones de las que solo se tiene un mapa imaginario? En el Nexo hay cosas nuevas a cada minuto, nada es igual y el instinto es incierto, sin importar que en verdad la gente que nunca vuelve no se sabe si de verdad ha muerto o ha encontrado un destino peor... Pero es posible que sea la segunda alternativa, ya que se maneja la teoría de que siendo una tierra tan caótica, la muerte no exista allí. Quedar atrapada por siempre en el Nexo no es una opción que Pharys maneje en lo absoluto, muchas cosas tiene por hacer.
No quiere ser desobediente, aún tiene compromisos que cumplir como lo es su servicio de guardia, por lo tanto se muestra opositora ante la idea de explorar ese mundo en toda su extensión, al menos todavía; admite que no es lo bastante fuerte para competir contra el embate que suponen los habitantes del Nexo, ¿Y quién sabe? Si por el camino se encontrase algo que es por completo desconocido y lejano hasta al mismo Nexo, o peor todavía toparse con el famoso Señor Oscuro de los rumores.
- Hay que tener en cuenta que los monstruos de ahí son capaces de destruir un reino. La verdad no sé cómo el Vínculo Mundial ha sobrevivido hasta ahora en perfectas condiciones. No me acobardo de mi decisión, pero usted debe estar consciente de cuando deberemos retirarnos si pretende ir de verdad a los Páramos... - Pharys encara al hombre ya sin una mirada filosa. Su semblante la muestra consternada, más no decaída a su propuesta inicial, y con un suspiro quiere darle a entender lo que pretende decirle; en resumidas cuentas, no se puede ir pensando en que todo pueda salir bien.
- No necesito nada de equipo, y no es por pecar de soberbia o considerar que soy invencible, sino que mi estilo sugiere que use solo mis recursos. Por ahora tendré que rechazar su oferta... Además no creo que sea buena idea acumular mis deudas. - Pharys se excusa con otra nerviosa sonrisa. Aferra un poco con sus manos la sombrilla al recobrar memorias de como el Nexo fue el lugar que le hizo determinar su personalidad, y la dedicación de su reina que se encargó de que así fuera, en la lucha contra una oscuridad más tenebrosa que la de esa dimensión donde el caos se alza sobre todo. No es un lugar al que le tema, por el contrario siente que se ha beneficiado del mismo, cosa que la lleva a pensar que si tiene tanto poder como para despertar el alma de una simple chica y darle la oportunidad de sentir convicción hacia la caballería, ¿Qué otras cosas no sería capaz de producir? ¿De verdad esta persona está dispuesta a tomar ese riesgo solo por unos objetos? - Dígame solo una cosa. ¿Realmente que busca? Para querer un lugar donde la magia tenga un flujo mayor, debe ser un deseo que no pueda cumplirse por otros medios menos mágicos... - Por unos segundos Pharys duda si uso la palabra adecuada para describir lo que quería decir, pero prefiere aguardar un poco por si necesita que la corrijan.
- Olvide esa pregunta si quiere. Ya en otro momento podrá responderla, aunque quiera saber sus motivos antes de partir. Es apresurado todo esto... Pero un favor es un favor, y no creo que haya un lugar donde incluso pagando su atención yo también pueda beneficiarme un poco; algo aprenderé, siempre se encuentra algo que ver. - Con disposición de no prolongar más tiempo en un lugar donde la temperatura alta se vuelve insoportable, Pharys anuncia sus intenciones de partir al ponerse de pie y caminar hacia la salida lentamente, pero aguarda antes de salir para escuchar la respuesta del hombre, si es que desea contestar ese asunto.
Pensativa queda ahora la guerrera, quien no prueba más bocado porque ya rozaría lo indecoroso por muy provocativos que puedan ser los dulces tan bien puestos sobre la mesa. En cambio, prefiere meditar consigo misma sobre esa resolución tan pronta que acaba de tener tanto ella como el extranjero, sobre esa intención de ir al Nexo en búsqueda de una respuesta. Hay varios lugares del mismo donde seguro se puede encontrar lo que se busca, pero también es una dimensión aislada donde el final de la vida está a la vuelta de la esquina, sin problema alguno de eso que dicen que aquellos que siguen al caos en su totalidad son inmortales... Claro está, nadie tiene más autoridad que el caos mismo, y ese es el que reside y gobierna en el misterioso y oscuro Nexo.
- Debo advertirle, que no creo que sea buena idea adentrarse demasiado en el Nexo. No temo acompañarle en ese viaje, pero muchas de sus respuestas puede que las encuentre en el Vínculo Mundial sin tener que exponerse tanto a riesgos. Caminar por los Páramos puede ser gratificante hasta cierto punto... Porque después del fuerte, mientras más andemos, menos garantizada está nuestra seguridad. - ¿Cuantos guerreros no han quedado perdidos por siempre entre esas extensiones de las que solo se tiene un mapa imaginario? En el Nexo hay cosas nuevas a cada minuto, nada es igual y el instinto es incierto, sin importar que en verdad la gente que nunca vuelve no se sabe si de verdad ha muerto o ha encontrado un destino peor... Pero es posible que sea la segunda alternativa, ya que se maneja la teoría de que siendo una tierra tan caótica, la muerte no exista allí. Quedar atrapada por siempre en el Nexo no es una opción que Pharys maneje en lo absoluto, muchas cosas tiene por hacer.
No quiere ser desobediente, aún tiene compromisos que cumplir como lo es su servicio de guardia, por lo tanto se muestra opositora ante la idea de explorar ese mundo en toda su extensión, al menos todavía; admite que no es lo bastante fuerte para competir contra el embate que suponen los habitantes del Nexo, ¿Y quién sabe? Si por el camino se encontrase algo que es por completo desconocido y lejano hasta al mismo Nexo, o peor todavía toparse con el famoso Señor Oscuro de los rumores.
- Hay que tener en cuenta que los monstruos de ahí son capaces de destruir un reino. La verdad no sé cómo el Vínculo Mundial ha sobrevivido hasta ahora en perfectas condiciones. No me acobardo de mi decisión, pero usted debe estar consciente de cuando deberemos retirarnos si pretende ir de verdad a los Páramos... - Pharys encara al hombre ya sin una mirada filosa. Su semblante la muestra consternada, más no decaída a su propuesta inicial, y con un suspiro quiere darle a entender lo que pretende decirle; en resumidas cuentas, no se puede ir pensando en que todo pueda salir bien.
- No necesito nada de equipo, y no es por pecar de soberbia o considerar que soy invencible, sino que mi estilo sugiere que use solo mis recursos. Por ahora tendré que rechazar su oferta... Además no creo que sea buena idea acumular mis deudas. - Pharys se excusa con otra nerviosa sonrisa. Aferra un poco con sus manos la sombrilla al recobrar memorias de como el Nexo fue el lugar que le hizo determinar su personalidad, y la dedicación de su reina que se encargó de que así fuera, en la lucha contra una oscuridad más tenebrosa que la de esa dimensión donde el caos se alza sobre todo. No es un lugar al que le tema, por el contrario siente que se ha beneficiado del mismo, cosa que la lleva a pensar que si tiene tanto poder como para despertar el alma de una simple chica y darle la oportunidad de sentir convicción hacia la caballería, ¿Qué otras cosas no sería capaz de producir? ¿De verdad esta persona está dispuesta a tomar ese riesgo solo por unos objetos? - Dígame solo una cosa. ¿Realmente que busca? Para querer un lugar donde la magia tenga un flujo mayor, debe ser un deseo que no pueda cumplirse por otros medios menos mágicos... - Por unos segundos Pharys duda si uso la palabra adecuada para describir lo que quería decir, pero prefiere aguardar un poco por si necesita que la corrijan.
- Olvide esa pregunta si quiere. Ya en otro momento podrá responderla, aunque quiera saber sus motivos antes de partir. Es apresurado todo esto... Pero un favor es un favor, y no creo que haya un lugar donde incluso pagando su atención yo también pueda beneficiarme un poco; algo aprenderé, siempre se encuentra algo que ver. - Con disposición de no prolongar más tiempo en un lugar donde la temperatura alta se vuelve insoportable, Pharys anuncia sus intenciones de partir al ponerse de pie y caminar hacia la salida lentamente, pero aguarda antes de salir para escuchar la respuesta del hombre, si es que desea contestar ese asunto.
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por Chikao Sáb Mayo 24, 2014 8:42 pm
La joven Pharys le había señalado a Chikao algo que él había obviado, quizás por la premura del asunto, pero no podía negar que las palabras de Pharys, denotaban un razonamiento más calmo, extenso
“Mi consejo es que escuches a la joven… Podría sorprenderte en más de una manera…”
“¿Y ahora de que estás hablando…?”
“No lo notas… ¿Verdad? ¿A cuántas personas conoces aquí…? Yo diría que incluida Pharys y a los monjes del Santuario… las cuentas con los dedos de la mano”
“Vaya… Voy a pensar que esto te agrada… y MUCHO ¿Cierto?”
“Como no tienes la menor idea… Además el café y los dulces de aquí arriba, no tienen parangón en momentos como estos…”
“Debería…”
“Si, deberías… ¡¡¡E-S-C-U-C-H-A-R!!! a la joven lo que te está diciendo… Creo fue clara al decirte que muchas de sus respuestas puede que las encuentre en el Vínculo Mundial sin tener que exponerse tanto a riesgos. Caminar por los Páramos puede ser gratificante hasta cierto punto...”
“Muchas de las respuestas…? Hmmm… Está bien, vea-”
“¡OH vaya! ¿Qué ha sido eso…?”
“¿Por qué me interrumpes? Además de ser molesto interrumpes mis pensamientos…”
“Nah, eso no, eso puedo hacerlo cuando necesites te llamen la atención y estés demasiado cerca del bosque como para ver el árbol delante de ti…”
Luego de escuchar lo que había recomendado Pharys a Chikao, este último, bajó la cabeza en señal de aceptación, el argumento erguido por la pequeña dama era tan sólido y obvio como un monolito.
No era necesario exponerse mucho, podía encontrar mucha información, sin necesidad de poner en riesgo la vida.
-Touchè Maidmoiselle Pharys… Punto a vuestro favor, y uno muy sólido si me permitís agregar- Respondió Chikao
Chikao continuó escuchando a Pharys, ahora, de frente a la vidriera en paralelo al cartel colgado en la pared, que anunciaba su lema como comerciante…
-Así que monstruos capaces de destruir un reino ¿eh?- susurró casi imperceptiblemente, para luego sonreír nuevamente y acariciar brevemente su barbilla, mientras tanto, algo le hizo suspirar, algo estaba pasando por la mente de Pharys que hizo que hasta cambiara su mirada, no era la misma de hacía algunos instantes, no esta era diferente…
“Si la sigues escudriñando de esa manera va a mirarte extraño de nuevo Chikao… ¡¡¡DEJA ESO AHORA MISMO!!!”
“¿Qué...?”
“¡Que dejes de mirarla de esa manera, vas a incomodarla a tal punto que va a irse sin que puedas averiguar nada!”
“Vale… vale, listo”
Chikao esperaba que Pharys no hubiera notado que estaba escudriñando sus movimientos. De alguna manera tenía que cambiar de tema, y rápido, ocultando así lo que quizás hubiera descubierto, la oportunidad llegó algunos momentos más tarde cuando Pharys amablemente declinaba la oferta al decir…
“-…Por ahora tendré que rechazar su oferta...-”
Rápidamente ideó una manera poco convencional, muy al estilo de Chikao… Tendría que hacer un breve acto de dramatismo, con lo cual procedió a hacer llorar a sus ojos, arrodillarse y levantar los brazos en señal de que se sentía mal por el rechazo, esperaba no descubriera el verdadero motivo del cambio de tema súbito.
-¡OHHH… Padre!... ¡¡¡Un belle maidmoiselle ha rechazado una transacción comercial!!!-
Ahora yaciendo en el piso, se colocó en posición fetal mientras succionaba su pulgar, casi obsesivamente, al escuchar a la joven que seguía…
Rápidamente se incorporó, y quizás resultaba extraño, puesto que no había signos de que hubiere estado llorando o cosa similar, su rostro ahora, parecía el mismo de siempre… Algunos momentos de distracción, esperaba haberlo conseguido. Luego de que su presencia volviera a la normalidad, si es que existía tal cosa como esa en Chikao, le explicó a Pharys el motivo, quizás no el verdadero…
-Estimada Pharys…- aclaró la garganta –Antes de que te retires, si así lo deseas… Te diré mi motivo para ir a tal lugar… Verás, soy un Dragón, y como tal necesito estar sintonizado con cierto tipo de energías, energías que están entramadas en lo mágico y místico… Para explicártelo mejor, preferiría lo veas…-
En ese momento, Chikao giró hacia su izquierda, dejando su pierna derecha un poco detrás, en relación de la izquierda, sus puños se levantaron en paralelo y a la altura del pecho, llenó sus pulmones de aire, cerró los ojos un instante y un grito de su voz…
-¡FUS!- Desató una breve per poderosa corriente de aire, tirando a uno de los sillones hacia atrás dejando ahora al respaldo como asiento y los objetos detrás del sillón también sintieron el fuerte empujón producido por el grito.
Luego del grito, dejó escapar un breve suspiro… y ahora en voz normal, mirando de frente Pharys y con una sonrisa, pero ocultando sus ojos detrás de la sombra producida por el sombrero agregó.
-No era mi intención el sobresalto causado, pero debías de saberlo, también quiero que sepas esto, voy a seguir tu recomendación, pediré audiencia con el regente del lugar, voy a estudiar el lugar y quizás re-entrenarme, parece que voy a necesitar recursos y amigos con influencias… jajajajaja-
“Mi consejo es que escuches a la joven… Podría sorprenderte en más de una manera…”
“¿Y ahora de que estás hablando…?”
“No lo notas… ¿Verdad? ¿A cuántas personas conoces aquí…? Yo diría que incluida Pharys y a los monjes del Santuario… las cuentas con los dedos de la mano”
“Vaya… Voy a pensar que esto te agrada… y MUCHO ¿Cierto?”
“Como no tienes la menor idea… Además el café y los dulces de aquí arriba, no tienen parangón en momentos como estos…”
“Debería…”
“Si, deberías… ¡¡¡E-S-C-U-C-H-A-R!!! a la joven lo que te está diciendo… Creo fue clara al decirte que muchas de sus respuestas puede que las encuentre en el Vínculo Mundial sin tener que exponerse tanto a riesgos. Caminar por los Páramos puede ser gratificante hasta cierto punto...”
“Muchas de las respuestas…? Hmmm… Está bien, vea-”
“¡OH vaya! ¿Qué ha sido eso…?”
“¿Por qué me interrumpes? Además de ser molesto interrumpes mis pensamientos…”
“Nah, eso no, eso puedo hacerlo cuando necesites te llamen la atención y estés demasiado cerca del bosque como para ver el árbol delante de ti…”
Luego de escuchar lo que había recomendado Pharys a Chikao, este último, bajó la cabeza en señal de aceptación, el argumento erguido por la pequeña dama era tan sólido y obvio como un monolito.
No era necesario exponerse mucho, podía encontrar mucha información, sin necesidad de poner en riesgo la vida.
-Touchè Maidmoiselle Pharys… Punto a vuestro favor, y uno muy sólido si me permitís agregar- Respondió Chikao
Chikao continuó escuchando a Pharys, ahora, de frente a la vidriera en paralelo al cartel colgado en la pared, que anunciaba su lema como comerciante…
-Así que monstruos capaces de destruir un reino ¿eh?- susurró casi imperceptiblemente, para luego sonreír nuevamente y acariciar brevemente su barbilla, mientras tanto, algo le hizo suspirar, algo estaba pasando por la mente de Pharys que hizo que hasta cambiara su mirada, no era la misma de hacía algunos instantes, no esta era diferente…
“Si la sigues escudriñando de esa manera va a mirarte extraño de nuevo Chikao… ¡¡¡DEJA ESO AHORA MISMO!!!”
“¿Qué...?”
“¡Que dejes de mirarla de esa manera, vas a incomodarla a tal punto que va a irse sin que puedas averiguar nada!”
“Vale… vale, listo”
Chikao esperaba que Pharys no hubiera notado que estaba escudriñando sus movimientos. De alguna manera tenía que cambiar de tema, y rápido, ocultando así lo que quizás hubiera descubierto, la oportunidad llegó algunos momentos más tarde cuando Pharys amablemente declinaba la oferta al decir…
“-…Por ahora tendré que rechazar su oferta...-”
Rápidamente ideó una manera poco convencional, muy al estilo de Chikao… Tendría que hacer un breve acto de dramatismo, con lo cual procedió a hacer llorar a sus ojos, arrodillarse y levantar los brazos en señal de que se sentía mal por el rechazo, esperaba no descubriera el verdadero motivo del cambio de tema súbito.
-¡OHHH… Padre!... ¡¡¡Un belle maidmoiselle ha rechazado una transacción comercial!!!-
Ahora yaciendo en el piso, se colocó en posición fetal mientras succionaba su pulgar, casi obsesivamente, al escuchar a la joven que seguía…
Rápidamente se incorporó, y quizás resultaba extraño, puesto que no había signos de que hubiere estado llorando o cosa similar, su rostro ahora, parecía el mismo de siempre… Algunos momentos de distracción, esperaba haberlo conseguido. Luego de que su presencia volviera a la normalidad, si es que existía tal cosa como esa en Chikao, le explicó a Pharys el motivo, quizás no el verdadero…
-Estimada Pharys…- aclaró la garganta –Antes de que te retires, si así lo deseas… Te diré mi motivo para ir a tal lugar… Verás, soy un Dragón, y como tal necesito estar sintonizado con cierto tipo de energías, energías que están entramadas en lo mágico y místico… Para explicártelo mejor, preferiría lo veas…-
En ese momento, Chikao giró hacia su izquierda, dejando su pierna derecha un poco detrás, en relación de la izquierda, sus puños se levantaron en paralelo y a la altura del pecho, llenó sus pulmones de aire, cerró los ojos un instante y un grito de su voz…
-¡FUS!- Desató una breve per poderosa corriente de aire, tirando a uno de los sillones hacia atrás dejando ahora al respaldo como asiento y los objetos detrás del sillón también sintieron el fuerte empujón producido por el grito.
Luego del grito, dejó escapar un breve suspiro… y ahora en voz normal, mirando de frente Pharys y con una sonrisa, pero ocultando sus ojos detrás de la sombra producida por el sombrero agregó.
-No era mi intención el sobresalto causado, pero debías de saberlo, también quiero que sepas esto, voy a seguir tu recomendación, pediré audiencia con el regente del lugar, voy a estudiar el lugar y quizás re-entrenarme, parece que voy a necesitar recursos y amigos con influencias… jajajajaja-
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Re: [Libre] Tienda: Hat'n'Clogs (Sombreros y Sandalias de Chikao)
por Pharys Azure Vie Mayo 30, 2014 8:36 pm
Si antes no sabía por dónde empezar a enumerar las cosas, ahora no sabe cómo es que llegaron a dar tantos giros. Se siente algo aliviada y agradecida de que el señor Thuban entendiese la difícil situación en la que se está colocando y de la que ella no puede ni desea negarse, pero si cuidarse. Muchos dicen que uno no muere en el Nexo y que en cambio solo desapareces en él, que no hay consecuencias irremediables y que todos los que no han vuelto solo han estado vagando por los Páramos a merced de los monstruos que los devoran una y otra vez. La verdad es que un destino como ese no es mejor que la muerte, y Pharys no sabe ni siquiera cuál de las historias es verdad o mentira, porque a diario se inventan historias que de una forma la gente las cree; ese lugar es donde una falsedad puede ser muy verdadera si se está en disposición de verlo con mente abierta, cosa que la mentalidad de caballería de la chica a veces la limita un poco, sin impedirle que también en ocasiones de rienda suelta a su imaginación. No se puede ir al Nexo sin pensar en que la peor de las pesadillas puede atacar, o de lo contrario se llevará sin problemas la cordura por los cuernos.
Sin embargo, algo la preocupa mucho más en ese momento, que es la reacción del hombre que se comporta como si las palabras de la niña fuesen no solo hirientes, sino traumantes. Pharys en ese momento hubiese querido no decir nada si esa era el resultado que obtendría, y por cómo es ella, la culpa no tarda en hacerla ver nerviosa, de no ser porque ese episodio de ataque a la autoestima parece durar lo mismo que el suspiro de un infante.
- Umm... ¿Está bien...? - Esa pregunta no sabe si de verdad tiene una sola respuesta, o una que al menos sea creíble, ya que el señor Thuban no parecía en lo absoluto alguien con una estable salud mental si se le juzgaba superficialmente. Ese hombre parecía de verdad haber salido de una experiencia que deja marcas bastante visibles en el comportamiento, que describen a alguien que podría ser capaz de lo más extraño, y que por eso el Nexo pueda llamarlo con claridad. Incluso su forma de actuar puede ser tanto cómica como extraña, y en el siguiente momento cambia a la seriedad que causa alerta. Lo bueno es que es educado e inspira confianza cuando no se ve tan sombrío, y mejor que sea así a sabiendas que cualquier otro caballero de Calad'Meeth lo hubiese cortado a la mitad si sintiese ese instinto de violencia en los ojos.
Hubiese podido decir algo que aligerara más el momento en caso que la recuperación tan inmediata del supuesto vendedor no la habría hecho mantener en silencio y expectante, que después de declararse a sí mismo como uno de la familia de los dragones, se dispuso a mostrar de lo que era capaz basándose en el uso de la magia. A Pharys le hubiese gustado comentar que podría no ser magia sino su propio talento de batalla, pero cree que solo esa palabra define bien que con un grito haya lanzado varias cosas, y la hayan obligado a colocar sus manos sobre su falda para evitar que se levante y la exponga. La chica de verdad se sintió más consternada por el hecho de que su duda creó un desorden por así decirlo, aunque admite que antes de llegar ya la tienda se veía un poco revuelta.
- Vaya... Debo decir que estoy impresionada... Tiene cuerdas vocales poderosas... - Como una apreciadora de la música debe darle ese cumplido al contemplar todo el desorden que causó con solo una nota, y que la verdad valdría la pena escucharle toda una canción entera, pero no en un concierto sino en un campo de batalla. - El Nexo no pertenece a nadie más que al Señor Oscuro, y nadie sabe dónde está... Y es mejor así, no creo que venga nada bueno al cruzarse con él. - La verdad que hablar sobre temas que desconoce no es una preferencia de Pharys, y por cómo va esa conversación, está demasiado cerca de tocar asuntos en los que se queda corta de respuestas. No quiere ser descortés, pero ha alcanzado el límite de lo que puede aportar, y con honestidad es mejor que se despida por ahora, y la siguiente vez que le encuentre, será cuando lo acompañe a esa realidad de eterna oscuridad. Con suerte, alguien se sumará a la campaña.
- No tiene que pedir tampoco permiso para entrar. Suena como un abuso, pero la entrada a ese lugar siempre ha sido libre para todos. Yo debo partir ahora y prepararme, en un par de días lo veré en el Vínculo Mundial si me busca. - Dicho esto, con una reverencia y bajando su cabeza en nombre de un título militar, se dispone la chica a dirigirse a la entrada que ahora será una salida. Antes de abandonar el lugar con la sensación ambigua de conformidad pero duda, se da la vuelta para despedirse como es debido. - Hasta pronto señor Thuban. Ha sido un gusto, tanto su servicio como conocerle. Le retribuiré con su búsqueda de conocimiento, una noble misión que todos alguna vez tenemos. - Pharys abre la puerta y se dispone a salir, sin necesidad de hacer ningún pacto o entablar promesas, porque para ella y para todo aquel que se llame caballero, cada palabra es un juramento.
Sin embargo, algo la preocupa mucho más en ese momento, que es la reacción del hombre que se comporta como si las palabras de la niña fuesen no solo hirientes, sino traumantes. Pharys en ese momento hubiese querido no decir nada si esa era el resultado que obtendría, y por cómo es ella, la culpa no tarda en hacerla ver nerviosa, de no ser porque ese episodio de ataque a la autoestima parece durar lo mismo que el suspiro de un infante.
- Umm... ¿Está bien...? - Esa pregunta no sabe si de verdad tiene una sola respuesta, o una que al menos sea creíble, ya que el señor Thuban no parecía en lo absoluto alguien con una estable salud mental si se le juzgaba superficialmente. Ese hombre parecía de verdad haber salido de una experiencia que deja marcas bastante visibles en el comportamiento, que describen a alguien que podría ser capaz de lo más extraño, y que por eso el Nexo pueda llamarlo con claridad. Incluso su forma de actuar puede ser tanto cómica como extraña, y en el siguiente momento cambia a la seriedad que causa alerta. Lo bueno es que es educado e inspira confianza cuando no se ve tan sombrío, y mejor que sea así a sabiendas que cualquier otro caballero de Calad'Meeth lo hubiese cortado a la mitad si sintiese ese instinto de violencia en los ojos.
Hubiese podido decir algo que aligerara más el momento en caso que la recuperación tan inmediata del supuesto vendedor no la habría hecho mantener en silencio y expectante, que después de declararse a sí mismo como uno de la familia de los dragones, se dispuso a mostrar de lo que era capaz basándose en el uso de la magia. A Pharys le hubiese gustado comentar que podría no ser magia sino su propio talento de batalla, pero cree que solo esa palabra define bien que con un grito haya lanzado varias cosas, y la hayan obligado a colocar sus manos sobre su falda para evitar que se levante y la exponga. La chica de verdad se sintió más consternada por el hecho de que su duda creó un desorden por así decirlo, aunque admite que antes de llegar ya la tienda se veía un poco revuelta.
- Vaya... Debo decir que estoy impresionada... Tiene cuerdas vocales poderosas... - Como una apreciadora de la música debe darle ese cumplido al contemplar todo el desorden que causó con solo una nota, y que la verdad valdría la pena escucharle toda una canción entera, pero no en un concierto sino en un campo de batalla. - El Nexo no pertenece a nadie más que al Señor Oscuro, y nadie sabe dónde está... Y es mejor así, no creo que venga nada bueno al cruzarse con él. - La verdad que hablar sobre temas que desconoce no es una preferencia de Pharys, y por cómo va esa conversación, está demasiado cerca de tocar asuntos en los que se queda corta de respuestas. No quiere ser descortés, pero ha alcanzado el límite de lo que puede aportar, y con honestidad es mejor que se despida por ahora, y la siguiente vez que le encuentre, será cuando lo acompañe a esa realidad de eterna oscuridad. Con suerte, alguien se sumará a la campaña.
- No tiene que pedir tampoco permiso para entrar. Suena como un abuso, pero la entrada a ese lugar siempre ha sido libre para todos. Yo debo partir ahora y prepararme, en un par de días lo veré en el Vínculo Mundial si me busca. - Dicho esto, con una reverencia y bajando su cabeza en nombre de un título militar, se dispone la chica a dirigirse a la entrada que ahora será una salida. Antes de abandonar el lugar con la sensación ambigua de conformidad pero duda, se da la vuelta para despedirse como es debido. - Hasta pronto señor Thuban. Ha sido un gusto, tanto su servicio como conocerle. Le retribuiré con su búsqueda de conocimiento, una noble misión que todos alguna vez tenemos. - Pharys abre la puerta y se dispone a salir, sin necesidad de hacer ningún pacto o entablar promesas, porque para ella y para todo aquel que se llame caballero, cada palabra es un juramento.
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por Chikao Dom Jun 08, 2014 11:54 am
Luego de la demostración a Pharys de lo que hasta el momento había rescatado de su otrora poder, Chikao con una sonrisa, y nuevamente con su mirada detrás de la obscuridad de su sombrero, se acercó a reacomodar el pequeño desarreglo causado por el grito de Chikao, mientras se acercaba, por un momento le pareció... asombrada, consternada, ¿Quizás una mezcla de ambas? mientras acomodaba uno de los objetos, le oyo decir a Pharys...
"- Vaya... Debo decir que estoy impresionada... Tiene cuerdas vocales poderosas... -"
-Gracias Pharys, aunque admito no está completo, es solo un tercio de lo que puede hacer.-
Pasados algunos momentos más, mientras Chikao continuaba... "acomodando" el pequeño último desorden, Pharys agregó una ampliación a lo antes explicado.
- El Nexo no pertenece a nadie más que al Señor Oscuro, y nadie sabe dónde está... Y es mejor así, no creo que venga nada bueno al cruzarse con él. -
-Hmmm... Supongo que, como dices tu Pharys, es mejor así... Jejeje-
Pharys se despidió de Chikao, no sin antes mencionarle que si le buscaba, la encontraría algún tiempo despues en el Vínculo Mundial, una promesa que seguro no dejaría pasar, de alguna manera, Chikao esperaba ver que clase de habilidades poseía Pharys, le intrigaba el poder verle en acción... y que habilidades mostraría la joven en combate ante determinado enemigo.
- Hasta pronto señor Thuban. Ha sido un gusto, tanto su servicio como conocerle. Le retribuiré con su búsqueda de conocimiento, una noble misión que todos alguna vez tenemos. -
-Hasta pronto Pharys! Igual, ha sido un gusto el que honres con tu presencia esta humilde tienda. Una cosa más, si necesitas un aliado en batalla, en cualquier momento y lugar, cuenta conmigo. Cuando llames mi nombre ahí estaré.-
Así Chikao le dijo, aunque con otras palabras, quizás Pharys no lo entendiera en ese momento, si quizás como sucedió con el grito, lo comprendiera al hacerlo, que para Chikao, no eran meras palabras, sino eran acciones.
Luego de que Pharys dejara la tienda, Chikao dijo.
-El cielo sobre tu cabeza y la voz en tu interior Pharys...-
"- Vaya... Debo decir que estoy impresionada... Tiene cuerdas vocales poderosas... -"
-Gracias Pharys, aunque admito no está completo, es solo un tercio de lo que puede hacer.-
Pasados algunos momentos más, mientras Chikao continuaba... "acomodando" el pequeño último desorden, Pharys agregó una ampliación a lo antes explicado.
- El Nexo no pertenece a nadie más que al Señor Oscuro, y nadie sabe dónde está... Y es mejor así, no creo que venga nada bueno al cruzarse con él. -
-Hmmm... Supongo que, como dices tu Pharys, es mejor así... Jejeje-
Pharys se despidió de Chikao, no sin antes mencionarle que si le buscaba, la encontraría algún tiempo despues en el Vínculo Mundial, una promesa que seguro no dejaría pasar, de alguna manera, Chikao esperaba ver que clase de habilidades poseía Pharys, le intrigaba el poder verle en acción... y que habilidades mostraría la joven en combate ante determinado enemigo.
- Hasta pronto señor Thuban. Ha sido un gusto, tanto su servicio como conocerle. Le retribuiré con su búsqueda de conocimiento, una noble misión que todos alguna vez tenemos. -
-Hasta pronto Pharys! Igual, ha sido un gusto el que honres con tu presencia esta humilde tienda. Una cosa más, si necesitas un aliado en batalla, en cualquier momento y lugar, cuenta conmigo. Cuando llames mi nombre ahí estaré.-
Así Chikao le dijo, aunque con otras palabras, quizás Pharys no lo entendiera en ese momento, si quizás como sucedió con el grito, lo comprendiera al hacerlo, que para Chikao, no eran meras palabras, sino eran acciones.
Luego de que Pharys dejara la tienda, Chikao dijo.
-El cielo sobre tu cabeza y la voz en tu interior Pharys...-
Fin de escena.
- Leeldlo luego de terminar el post:
- Off: Acá van los créditos y agradecimientos.... xDDD
Gracias a:
1)_ Pharys por animarse al rol con un tendero desquiciado (?)
2)_ Pharys por soportar los momentos de interminable espera entre post y post.
3)_ A todos los que leen y leyeron el tema, por hacerlo popular.
Chikao- Mensajes : 36
Localización : Frente a la plaza de los inventos, en mi humilde local
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